Como si por repetirlo modificase la realidad, el candidato del oficialismo continuista insiste en que sólo él tiene propuestas para un eventual próximo cuatrienio en el cual pasaría la mayor parte del tiempo corrigiendo lo que desde hace 8 años está de mal en peor, indicadores al canto. Comprobable es que, a la fecha, el país desconoce cuál sería el programa de gobierno de un partido-corporación donde sus dirigentes-empresarios están muy ocupados terminando de drenar el erario para intentar, nueva vez, comprar la voluntad popular y continuar su dictadura de la mayoría en todos los poderes del Estado.
Las que ya se conocen y está disponibles para todos son las propuestas programáticas del próximo gobierno de Hipólito Mejía para el periodo 2012-2016, cuyo plan de acción inmediato frenará el impresionante derroche y la criminal malversación de fondos públicos de un nutrido grupo de presupuestófagos que han manejado el país como un negocio para enriquecerse ellos y empobrecer a esas mayorías que el M-20 votarán por un verdadero cambio de rumbo, como indican los sondeos en las calles.
Un equipo pluridisciplinario compuesto por técnicos del partido y del comando de campaña ha elaborado el programa del PRD alrededor de cuatro grandes ejes: desarrollo humano generación sustentable de riquezas, equidad social y el fortalecimiento institucional, los que se concretan, tanto en los contenidos de las políticas públicas como en una propuesta de inversiones en obras de infraestructura.
El plan de inversiones públicas fue realizado en base a las necesidades de las personas en cada municipio del país que ha sido consolidado a nivel provincial, regional y nacional con el fin de garantizar equidad territorial y coherencia macroeconómica. Constituye una guía para la acción del sector público y normativa para el sector privado que permitirá crear condiciones para una inversión de más calidad en términos de aumentar el empleo, fortalecer el crecimiento económico y generar inclusión social y territorial
El componente de desarrollo humano se concretiza en un amplio y vigoroso plan de inversión pública en el sector educativo, con una visión integral que abarca todos los niveles: inicial, básica, secundaria y universitaria, así como la formación técnico profesional y laboral.
La inversión en salud pone especial énfasis en las políticas preventivas que inciden en los determinantes sociales de la salud: los acueductos y el alcantarillado, saneamiento básico, solución a la problemática de la basura, el manejo alimentario, los mercados de bienes y los centros de atención primaria.
La generación de riquezas tiene tres objetivos primordiales: crear más y mejores puestos de trabajo; aumentar, diversificar y agregar mayor valor a nuestra oferta local y exportable de bienes y servicios; y abordar un emprendimiento público-privado en áreas de la actividad económica donde el país tenga ventajas competitivas con una visión de mediano y largo plazos.
Expuesto a grandes rasgos, hemos trazado la hoja de ruta por donde transitará el próximo gobierno del PRD para que la guagua deje de ir en reversa y camine hacia delante.
