Policía cibernética

Anteriormente, cuando no existía el internet y las redes sociales,la inconformidad, las quejas y las protestas se expresaban a través de marchas, mítines y manifestaciones, que en la mayoría de los casos eran reprimidos a bombazos lacrimógenos por las autoridades.

Se establecieron normas y reglamentos que exigieron la obtención de un permiso para organizar una marcha, lo que en gran medida condiciona la realización de cualquier protesta o reclamo político y social.

Todo eso ha cambiado en estos tiempos, donde las redes sociales han transformado la manera en que la gente expresa sus opiniones y descontentos, merced a la posibilidad del tratamiento de temas que se convierten en virales a través de las redes sociales.

Ya no hace falta hacer un mitin para protestar, cuando en la internet se se cuenta con un recurso más seguro y poderoso, como es la capacidad de crear movimientos de opinión pública en torno a cualquier tema que la gente puede asumir de manera masiva.

Las tendencias que se generan por esta vía obligan a cambiar cualquier percepción o agenda.

Quienes vivimos los difíciles y agitados años 60’s y 70’s no contábamos con el recurso de la internet para externar nuestras quejas y protestas contra el régimen, soportando los rigores de la represión, algo que hoy día se puede decir que nos llevan de ventaja las nuevas generaciones.

No hace falta ya la protesta callejera, ni enfrentarse a pedradas con la policía, cuando desde la comodidad de la casa se puede generar una corriente de opinión pública que a final de cuentas, puede resultar más efectiva, poderosa y demoledora que un marcha de las que se reprimen con bombas lacrimógenas.

¡Disuélvanlas ahora!. Tendrían que inventarse una policía cibernética.