SANTIAGO. Tres momentos especiales ha tenido en su vida la comunicadora Brenda Sánchez: conocer al futuro padre de sus hijos, contraer con él matrimonio y tener dos hijos.
De esas tres bendiciones, cuando se le pregunta cuál es la más importante para ella, no lo piensa ni un segundo y responde “mis hijos Prenda y Haimethomas Frías Sánchez”.
A propósito de celebrarse el próximo domingo el Día de las Madres en nuestro país, Brenda se considera una progenitora afortunada, máxime cuando ha logrado, en compañía del también comunicador Haime Thomás Frías, inculcarles los mejores valores, a través de sus ejemplos de vida.
Tercera de cinco hijas que procreó el matrimonio del santiaguero Lerfio Sánchez y la puertorriqueña Lydia Crespo Guerrero, Brenda define a sus hijos como el mayor tesoro que Dios haya podido darle como madre, condición que define “como mi mejor profesión, mejor entretenimiento y la mejor condición de haberlos traído al mundo”.
Dice sentirse orgullosa de la formación que tanto ella como Haime Thomás le han dado sus hijos, especialmente en el aspecto educativo “pues se trata de un trabajo de dos y él fue un buen esposo, por lo que ellos tienen los pies bien puestos sobre la tierra”.
Tanto ha cuidado y protegido Brenda sus dos hijos, que nunca quiso exhibirlos públicamente mientras fueron pequeños, sin capacidad para discernir. Por eso no ve bien que algunas comunicadoras hagan lo contrario y estima que deben cuidarlos un poco más en ese aspecto “porque hay que cuidar esos tesoros hasta que tengan edades avanzadas de adolescentes”.
La experiencia de ser madre afortunada la define como una especie premio de lotería, pero que el premio que se puede ganar con una conexión sincera con los hijos, siempre teniendo como basa una buena educación en sentido general.
Brenda es licenciada en psicología, misma carrera que estudia su hija Prenda en una universidad de aquí, en adición a los conocimientos de negocios que en verano adquiere en un centro de altos estudios del extranjero. Haimethomas cursa el tercer año del bachillerato.
Su rol de comunicadora lo desarrolla conjuntamente con el cargo de directora general del Gran Teatro del Cibao, puesto que desempeña desde hace cinco años y que define como un gran regalo que le hizo el presidente Danilo Medina al designarla, responsabilidad que ha sido para ella de una gran experiencia.
Su llegada a ese puesto público no fue fortuito, porque por varios años se compartido sus responsabilidades profesionales y del hogar con la actuación y su condición de bailarina.
