SANTO DOMINGO.- La doctora Janet Toribio Acosta, directora de la Unidad de Cardiología Pediátrica de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), destacó la necesidad de que los sonografistas obstétricos se capaciten en la detección de cardiopatías, ya que con ello se evitarían muchas muertes fetales y de bebés.
Lamentó que pese a los avances tecnológicos en ecocardiografía muchas veces se le da importancia a la apariencia del feto y a detectar otras patologías diferentes a las que presenta el corazón. Detalló que entre ocho y 10 de los bebés nacen con enfermedades del corazón y que el tres por ciento de ellos tienen cardiopatías críticas que si no se operan antes de los 30 días pueden causarles la muerte.
“Hay que formar a los sonografistas obstétricos para que lleguen a un diagnóstico de esas cardiopatías antes de las 30 semanas. Si no te lo envían antes de las 30 semanas es difícil que tú puedas abordarlo quirúrgicamente”, expresó tras su intervención en la XV Jornada Médico Científica que celebró Cedimat el viernes y sábado para debatir con especialistas nacionales y extranjeros los últimos avances de la medicina.
La especialista recomendó también que embarazadas se practiquen una ecografía fetal entre las 22 y las 28 semanas de gestación y que se le haga rutinariamente una ecografía al bebé, ya que el 15 por ciento de las cardiopatías no tienen manifestaciones ni se escuchan con un estetoscopio.
“¿Cuánto cuesta una eco para no hacerla preventiva? Hay niños que han muerto jugando sin que su familia nunca supiera que tenía una enfermedad cardíaca”, manifestó.
Signos de alarma
La cardióloga pediátrica pidió a los padres estar atentos a signos que podrían indicar una enfermedad del corazón en un bebé o niño como que esté muy pálido, tenga dificultad para respirar, que se canse cuando coma o llore, o que su piel tome un color morado.
Sostuvo que en República Dominicana no se hacen todavía operaciones intraútero pero que sí cuenta con personal e infraestructura para ello.
Agregó que si los padecimientos cardíacos se detectan en el útero el feto puede recibir tratamiento con la medicación de la madre y se puede planificar con la familia las acciones al tomar tras el nacimiento o simplemente que los padres puedan adaptarse a la no viabilidad del niño.
