Juan Bosch cubrió una etapa dentro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que va de 1939, cuando esa organización fue fundada en La Habana, Cuba, hasta su salida en 1973.
José Francisco Peña Gómez también tuvo una larga y formidable etapa dentro del PRD, a partir de 1961 cuando se integra al mismo hasta su muerte en 1998.
Aunque fue segundo de Bosch hasta 1973, pero con tremendas luces propias, es ese año cuando el desaparecido líder asume el mando supremo del PRD. Son 12 años que van de 1961 a 1973 como segunda y notable figura perredeísta, y 25 que van de 1973 al citado año de su ida a destiempo.
Muchos pensaron que así como Peña vino después de don Juan, después de aquel vendría a dominar un Fello Suberví, una Milagros Ortíz Bosch, un Hatuey De Camps u otra de las personalidades perredeístas que vieron la salida de Bosch para fundar el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y la muerte del doctor José Francisco Peña Gómez.
No fue así, ya que de las filas del desaparecido Partido Revolucionario Social Cristiano había llegado al PRD quien se convertiría en una especie de sucesor de Bosch y de Peña: Rafael Hipólito Mejía Domínguez.
En las primarias para escoger el candidato presidencial del PRD para las elecciones del 16 de mayo de 2000, el super exitoso secretario de Estado de Agricultura del gobierno del presidente Silvestre Antonio Guzmán Fernández ganó de manera abrumadora con un alto porcentaje de 72%.
Y a seguidas ganó fácilmente los comicios de 2000, venciendo a dos candidatos y dos partidos de gran fuerza: Danilo Medina con su PLD y Joaquín Balaguer con su Partido Reformista.
Y desde entonces a la fecha, o sea, de 1999 a 2008, se ha sentido en el PRD la fuerza de hoy ex presidente e influyente Hipólito Mejía.
Pero hoy, a pesar de la importancia que sigue teniendo el ex presidente Mejía, el Partido Revolucionario Dominicano tiene un nuevo líder: Miguel Vargas Maldonado.
Cuando le tocó someterse al escrutinio de las bases y de todos los perredeístas para escoger el candidato presidencial que enfrentaría al presidente Leonel Fernández el 16 de mayo de 2008, Miguel Vargas Maldonado estableció un récord en el PRD (y cuidado!) ganando la Convención con un demoledor 80%, que ni siquiera el más grande líder de masas de la historia dominicano, como yo bauticé a Peña Gómez, pudo alcanzar dentro de su partido, ya que incluso llegó a perder una Convención a manos del ex presidente Jacobo Majluta.
Ganar una nominación presidencial libre, democrática, abierta y competitiva con un 80% es algo que muy pocas veces ocurre en la historia política de cualquier país.
Pero…a Miguel Vargas Maldonado le quedaba todavía otro gran reto: demostrar que podía ser un contrincante de calidad ante las aspiraciones reeleccionistas del más importante jefe político de la Nación y nueva estrella del firmamento electoral criollo: Leonel Fernández. Y con Leonel Fernández enfrentar también la poderosa maquinaria del Partido de la Liberación Dominicana, el poder del Estado y el sabotaje de un sector de su propio partido.
¡Salió airoso de la prueba!
Sucedió lo que nadie pensaba que podía suceder ante tantas dificultades, desafíos, adversarios y poder: obtener un 40%, un 7% más que lo obtenido por Hipólito Mejía estando en el poder.
Miguel Vargas Maldonado, el líder que sucedió a Peña Gómez, es el aglutinador, el unificador y el que encarna la cronología dirigencial de la historia del PRD: 70 años que van de 1939 a 2009.
