Opinión

Cartas de los lectores

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Palo si boga

Señor director:
El ministerio de Obras Públicas reconstruyó la vieja carreterra Villa Mella-La Victoria, transformándola en una excelente vía por la que hoy transita un mayor número de vehículos livianos y de carga.

Obras Públicas mejoró las curvas, amplió los carriles y construyó los paseos que no existían, porque la misma era una vía rural construida durante la tiranía de Rafael Trujillo para llegar y salir de la Penitenciaría Nacional de La Victoria.

Ya se observan en mayor número vehículos del transporte urbano que van hasta Villa Mella y Sabana Perdida y una elevada cantidad de personas de los distintos campos de La Victoria circula a toda hora por la vía.

Pero la queja de algunas personas es que ahora los vehículos circulan a una velocidad muy alta, y que han sido varias las personas lesionadas por esta causa.

Las quejas se refieren especialmente a los minibuses que viajan desde el barrio de Villa Consuelo hasta Villa Mella, La Victoria,

Los Castillo, Hacienda La Estrella
Otra de las quejas es que algunos jóvenes en motocicleta usan la vía para echar competencia de velocidad, por lo cual muchos residentes en La Victoria exigen a la Autoridad Metropolitana del Transporte tomar cartas en el asunto y proceder de acuerdo a la ley contra quienes se dedican a esa prácticas.

Antes la queja era porque la carretera estaba en mal estado, y ahora las quejas se deben a que muchos conductores abusan de la velocidad por el buen estado de la vía.

Ojalá la Autoridad Metropolitana del Transporte (Amet) intervenga.

Atentamente
Rosario Hernández Fabián

Muchos apagones
Señor director.
La Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Ede-Este) mantiene a los residentes de la región Este de Santo Domingo en una constante zozobra por los diarios apagones de hasta ocho horas seguida, sin dar una explicación de tal abuso.
Lo grande del caso es que Ede-Este cobra la misma tarifa pese a que sólo ofrece la mitad del servicio de electricidad a sus usuarios que ya no sabemos qué hacer.
Encima de eso la oficina de Protección al Consumidor es un organismo inoperante que nada resuelve y que siempre está a favor de los que tienen el dinero. Los empresarios.

Atentamente,
Altagracia García Rojas

El Nacional

La Voz de Todos