El Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia) recomendó hoy paralizar la escuela que construye el Gobierno a orillas del río Ozama, en el sector Los Guandules, en la capital.
La entidad alegó que esa escuela, Los Cocos, representa gran peligrosidad para la población escolar de la zona.
El Codia dio a conocer un informe de la comisión técnica que designó para estudiar la factibilidad de construir el plantel en ese lugar.
El presidente del Codia, arquitecto Francisco Mosquea, ofreció la información en rueda de prensa, acompañado de los ingenieros comisionados Antonio Cocco Quezada, José Torres y la arquitecta Esther Morillo.
“La construcción de ese centro escolar en el lugar pautado constituye un latente peligro, puesto que el terreno está a menos de 50 metros de la orilla del Río Ozama y colindante con la cañada de Bonavides”, expresó.
“Además de que no cuenta con un estudio hidrográfico que definirá el nivel de inundaciones a que estarían expuestos estos terrenos frente a posibles y reales crecidas del Ozama”, siguió diciendo.
La evaluación hecha por los técnicos del Codia indica que esa construcción viola las normas establecidas sobre ese tema, el reglamento R-023 para el diseño de plantas físicas escolares y amenaza la seguridad de los estudiantes, quienes estarían en constante peligro en caso de una crecida abrupta del río Ozama.
Ese reglamento fue puesto en vigencia mediante el decreto 305-06 y elaborado por los ministerios de Obras Públicas y Educación, con la colaboración del Codia y otras instituciones que integran la Comisión Nacional de Reglamentos Técnicos de la Ingeniería, la Arquitectura y ramas afines.
La inversión
Mosquea dijo que en vista de que el Ministerio de Educación ha invertido en esa obra unos $30 millones, recomienda la construcción en el lugar de un edificio multiuso, para aprovechar los pilotes que ya se han colocado en el terreno.
Además las autoridades educativas también podrían construir allí canchas deportivas al aire libre y talleres de formación integral, indicó.
El presidente del Codia manifestó que los comisionados hicieron varias visitas al lugar estudiado y contactaron a los dirigentes comunitarios de la zona, algunos de los cuales favorecen la construcción de la escuela.
Esas visitas permitieron a los miembros de la comisión tener una idea acabada de los riesgos a que estaría sometida la comunidad escolar.
“Fueron consultados ejecutivos de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte, para conocer los alcances de la vía perimetral que se proyecta construir en todo el borde del río Ozama y su impacto en el proyecto”, dijo.
Los técnicos también sostuvieron un encuentro con el arquitecto Rodolfo Guzmán y el ingeniero Rafael Pichardo, del Ministerio de Educación, para “conocer los detalles de la obra y los estudios que llevaron a seleccionar los señalados terrenos”.
Alcances del estudio
Mosquea expresó que la entidad que dirige analizó, además, documentos de la Dirección General de Ordenamiento Territorial, institución que elaboró el plan que establece los límites que determinan donde deben erigirse construcciones en esa zona.
“Con el propósito de profundizar aún más las investigaciones, procuramos y analizamos el Plan Maestro de Alcantarillado Sanitario del Gran Santo Domingo, preparado por la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD).
Indicó que también “se efectuaron las consultas y mediciones digitales para verificar distancias del río, de los manglares y la cañada de Bonavides”.
UN APUNTE:
Educación
El estudio del Codia fue iniciado el 15 de este mes.
Recientemente, el arquitecto Rodolgo Guzmán, director de Fiscalización de Edificaciones Escolares del Ministerio de Educación, dijo que los estudios realizados en el lugar donde se edificará el plantel indican que no hay posibilidad de que el terreno pueda inundarse. El Codia considera peligroso que el río inunde esos terrenos que están a menos de 50 metros de su orilla y los niños sean afectados.
