Recuerdo como ayer, la primera vez que la vi en pantalla, cuando iniciaba como conductora del programa Santo Domingo Invita, descubierta por Negro Santos, para exponer los atractivos urbanos y rurales de la República Dominicana.
Su formación cultural, su agradable manera de presentación televisiva, su imagen de mujer mulata hermosísima (recordando que cada mujer es “única, real e irrepetible”), Zoila Luna llamó la atención de importantes espacios televisivos, que la atrajeron a su redil y la explosión de su talento fue ya indetenible.
Hizo historia como presentadora de El Show del Mediodía, especio en el cual tuvo el apoyo para perfeccionar su quehacer, del maestro Yaqui Núñez del Risco.
Posteriormente desarrolló proyectos propios en televisión, pero lo suyo estaría por llegar cuando descubrió el poder de incidencia de la radio, medio que le abrió las puertas con un espacio radial único y que desde que se anunció, se sabía que una radio con sentido de género (sin excluir la audiencia masculina) estaría en el aire: Solo para mujeres.
El programa radial, que difunde Zol es un paradigma en cada una de sus emisiones por tratar temas propios de las mujeres, con la asistencia de figuras (sobre todo femeninas) con conocimiento y conciencia.
Solo para mujeres es el espacio radial que ofrece a las mujeres dominicanas herramientas que les apoyan a ponerse en contacto con su poder interior, que les motiva a tomar decisiones en favor de su desarrollo y plenitud. Solo para mujeres ofrece un espacio de equidad, de reencuentro entre los géneros .
Es un programa dirigido a mujeres, en donde también aprenden los hombres Zoila Luna está corriendo para el certamen de Diario Libre, Hombre y Mujer del Año. Entiendo que debería ser la ganadora del hermoso y transparente trofeo que la haga Mujer del Año 2016.
