El parque de Invivienda, en Santo Domingo Este, se ha convertido en el lugar más concurrido por las personas que se ejercitan, debido a la comodidad y seguridad del lugar.
Desde las cinco de la madrugada hasta media mañana de cada día, el parque es un gimnasio improvisado donde la gente lleva radio y hasta instructores de gimnasia.
Quienes se ejercitan lo hacen para mantenerse en salud y otros por recomendaciones médicas.
Muchos van en compañía de amigos, animales y en pareja.
Para María del Carmen Bidó, el que no se ejercita va rumbo a las enfermedades, porque con 70 años dice tener el mismo brío de una adolescente.
Ejercitarse es terapia, ya que sirve como estimulante para olvidar los problemas de la casa, según Esperanza Espinal.
Agregó que nunca en su vida le han recetado ni una aspirina, y esto lo atribuye a la rutina de ejercicio diario que lleva.
Otra que no deja de hacer ejercicio a diario es Aracelis González quien hace aeróbicos para tonificar y tener más vigor al realizar actividad sexual.
Anteriormente el parque no era tan utilizado como ahora para la práctica de ejercicio, por el estado de abandono en que se encontraba.