ST. PETERSBURG.- Danny Salazar se apresuró a proclamar su salida en la victoria 6-2 de los indios sobre el Rayos este martes como su mejor apertura de la temporada, pero fue igual de rápido para dar algo de ese crédito a su compañero de equipo Cody Anderson.
Una noche después que Anderson comenzara su apertura con 6.1 entradas perfectas en ruta a su primera victoria en Grandes Ligas, Salazar comenzó su aparición al retirar los primeros 15 bateadores que enfrentó antes de finalmente conseguir una victoria después de permitir dos carreras -una limpia- con dos hits.
“Esta noche yo estaba tratando de seguir a Cody”, dijo Salazar. “La forma en que lanzó, me encantó realmente. Yo revisé su juego hoy antes del partido para ver dónde estuvo lanzando, cómo estuvo manejando el lanzar adentro y afuera y moviendo la pelota”.
El derecho comenzó su noche ponchando a Kevin Kiermaier con un tercer strike cantado, pero a partir de ahí, el lanzamiento de ponches desapareció para Salazar ya que sólo registró uno más en el encuentro para establecer su nueva marca de menos ponches en la temporada. En cambio, Salazar molió a través de turnos al bate para abrirse camino a través de cinco episodios prefectos, cayendo debajo en la cuenta en seis ocasiones diferentes y tener que trabajar en cuatro cuentas completas.
“Creo que es por eso que ustedes no vieron los ponches, incluso en una noche en la que sólo se vieron un par de hits”.
Estar detrás en el conteo, sin embargo, en última instancia, costó a Salazar una oportunidad en la historia cuando caminó a Asdrúbal Cabrera para abrir la sexta y perder la búsqueda del juego perfecto, y luego permitió un doble a Curt Casali en una bola rápida en 2-1 para terminar con su búsqueda del no-hitter. Ver la historia escapar de su alcance, sin embargo, no tuvo efecto sobre el lanzador de 25 años de edad.
“Reaccioné normal porque fue sólo un doble”, dijo Salazar. “Yo estaba ganando el juego, así que traté de mantener la calma y traté de terminar mi trabajo”.
Tres lanzamientos después, Salazar consiguió que Kiermaier fallara con un elevado para terminar el sexto, y luego respondió lanzando otra entrada perfecta en el séptimo. En el octavo, sin embargo, perdió la blanqueada cuando Cabrera bateó un doble para llevar al plato a Logan Forsythe, y él se retiró después que Francisco Lindor, quien hizo una gran atrapada de zambullida en el cuarto para robar a Evan Longoria de un hit y preservar el intento de Salazar de la perfección, cometió un error con dos outs.
