Opinión

DE SALUD Y OTRAS COSAS

DE SALUD Y OTRAS COSAS

César Mella

cesarm2@codetel.net.do

 

Televisión y violencia. Apuntes

Nuestros hijos pasan una buena parte de su tiempo frente a este aparato.

Las imágenes sin control que ahí se pasan de una u otra forma influyen en nuestras creencias y actitudes.

En los años 60, Ross y Jacques ( E.U. y Bélgica) proyectaron películas con contenidos violentos a jóvenes, mismos que fueron seguidos en su conducta, resultando que sus comportamientos agresivos fueron mas frecuentes que un grupo control que no fue expuesto a idéntico estímulo, lo que parece confirmar el refrán de que “la violencia engendra violencia”.

En los niños la adicción a la televisión compite con sus horas de sueño saludable y con el tiempo dedicado a sus tareas escolares.

Aquellas familias que poseen canales llamados del cable deben tener mucho cuidado con la pornografía y otras escenas que un niño con un control en la mano no está en capacidad de digerir adecuadamente. Los chicos son esponjas que absorben todo y que aprenden por imitación.

Albert Bandura asegura que el comportamiento humano es fruto del aprendizaje social y que en consecuencia somos agresivos porque se nos enseña a serlo.

Ya Sigmund Freud había planteado que instintivamente el humano es violento y que la agresividad esta motivada por las frustraciones.

Adrey (1966) ha dicho que “ el hombre es un depredador nato”, y que su cerebro es capaz de diseñar armas para satisfacer su agresividad y para matar.

Tenemos canales dedicados a la vida animal; a la historia; a orientar en salud; de historietas infantiles en función de la edad, pero muchos padres entienden que el único tiempo de “tranquilidad” es cuando los muchachos están narcotizados frente a la tele o pegados al computador.

A todo esto se agrega que en muchos hogares, cada quien tiene un telerreceptor y “nadie sabe lo que ve el otro”. Los viejos las noticias, la señora la telenovela ….. ¿y tus hijos que ven?.

Muchas historias reales recogen el drama de niños que se han lanzado del balcón imitando a uno de los nuevos héroes como el hombre araña; algunos levantan la voz y pegan a los animales y a los mayores a imitación de escenas que lo inducen en una de esas series de los “transformer” modernos.

Con el avance de la tecnología estamos en presencia no del Atari, el Sega y otros juegos interactivos que parecían inocentes. Ahora las Guerras de las Galaxias, El fin del mundo y otras series ponen a competir a jovencitos que dedican horas enteras a veces desde hogares distantes a participar como competidores donde la muerte y la destrucción son la regla.

Tanto en los titulares en tinta roja de los medios de comunicación escritos el sensacionalismo morboso del número de muertos y heridos es reproducido también en la tele en una loca carrera de suspenso sangriento en las crónicas de los acontecimientos violentos que a diario ocurren en la sociedad.

Recientemente en el barrio de Villa Francisca , en Santo Domingo un hombre mató a su madre , hirió a su esposa y luego se suicidó con la misma arma de fuego y fue desplegado de forma espectacular ante el espanto de los menores.

Vamos a racionalizar el tiempo de nuestros niños ante la tele. Busquemos asesorías sobre los programas adecuados. En un país sin canales exclusivos para educar, tome las riendas en lo que respecta a los contenidos de lo que sus hijos consumen: ¡Salud!

El Nacional

La Voz de Todos