Se trata de un conflicto incómodo entre la imagen propia, los pensamientos, nuestras creencias, las actitudes o percepciones y la conducta.

Disonancia significa choque.

Estamos comentando una importante teoría del mundo de la psicología científica ( Festinger, 1957 y otros), que establece que en el humano las ideas contradictorias o antagónicas nos causan malestar y sentimientos de incongruencia.

Cognición se refiere a ideas o a los pensamientos. Disonancia significa choque o desacuerdo.

Dennos Coon ( Tratado de Psicología 2009) pone como ejemplo de este conflicto psicológico el caso de los fumadores que leen en la caja de los cigarrillos que puede producir cáncer y si embargo siguen fumando

El diabético, (placer de lo prohibido), se da una hartura de dulces y entonces es capaz de decir: A mí no me fuñan con estadísticas, yo manejo eso

Producto de esa disonancia se produce un complejo mecanismo subjetivo mediante el cual intentamos convencernos a nosotros mismos de que hemos hecho lo correcto.

Cuando una pareja discurre en el tiempo y ambos comprueban que hay cosas del otro que no le gustan, ambos intentan reducir esa disonancia entre el gustar, querer y saber que el otro está lleno de defectos.

Se inventan historias que convierten los defectos en virtudes y entonces escuchamos frases justificatorias o racionalizantes como las siguientes: Él es individualista pero muy seguro de sí mismo; Mi mujer es demasiado coqueta pero de ahí no pasa;

Todos califican a mi novio de inestable, sin embargo yo lo valoro como un ser excepcional de un espíritu libre

Ser auténtico y coherente entre el pensar y el hacer no es fácil.

Nos movemos a diario en medio de simulaciones, acomodamos opiniones complacientes, aceptamos a gentes desagradables y en fin, hacemos cosas para la que no estamos preparados moralmente o que no satisfacen nuestros valores.

La sociedad dominicana está asistiendo a la valoración de sus actores políticos en la más brutal de las disonancias.

En tiempos en que las herramientas ideológicas o filosóficas que sustentan la militancia partidaria no existen.

Son épocas en que apoyar, ayudar y promover una candidatura depende de múltiples circunstancias en donde, siempre, se espera algo a cambio, la disonancia entre la palabra, las creencias y la acción es tremendamente preocupante.