Aunque muchos padres aún piensan que sus niños y adolescentes no tienen problemas y suelen decir que “lo tienen todo resuelto”, lo cierto es que estos también se deprimen, aunque manifiestan los síntomas de una manera muy diferente a la de los adultos.
La doctora María Jerez Morales, médico psiquiatra y especialista en duelos y adicciones dice al respecto que debemos prestar la debida atención cuando observamos a un joven o adolescentes, con pocos deseos de estudiar , que no desea compartir con sus amigos e incluso que no logra comunicarse verbalmente con sus seres queridos, ya que este joven la mayoría de las veces presenta falta de madurez emocional y ausencia de recursos para manejar sus propios sentimientos y no siempre saben describir lo que sienten.
La profesional afirma que aunque existen pocos datos estadísticos acerca de este grupo en nuestro país, la Organización Mundial de la Salud nos data en que cerca del 10 al 15 % de los jóvenes padecen de depresión, en todo el mundo. Jerez Morales, quien tiene su consulta en el Centro Terapéutico Psicológicamente, dice que estos síntomas pueden variar según la edad de inicio y confundirse con el comportamiento evolutivo propio de la edad.
“Hago mucho énfasis en el reconocimiento oportuno de los síntomas de alarma descritos anteriormente, por parte de los padres y familiares, quienes quizás por que incurran en una negación de la patología o sentirse que han fallado como padres en la educación de sus hijos ,no logren ser abiertos, pero la realidad es que sí se debe tratar de reconocer y aceptar que ocurre un problema que puede resultar crónico e incluso grave, pudiendo ocasionar en este joven una ponderación del suicidio y al uso o abuso de sustancias prohibidas, pero que con un buen tratamiento eficaz los resultados logran se favorables para obtener una vida plena y feliz”.
