El diario Hoy festejó ayer su cumpleaños 37, con el lauro de ser el primer periódico a color, con diagramación innovadora, en integrar un cuerpo de reporteros para la investigación periodística y en concertar alianzas estratégicas con publicaciones extranjeras e impreso en rotativa de última generación.
Durante casi cuatro décadas, el fraterno matutino ha sido un intransigente escudero de la democracia y de los derechos ciudadanos, sin abdicar ni por un segundo a su compromiso de recabar y servir información veraz, objetiva, libre de prejuicios.
Fundado el 11 de agosto de 1981 por el empresario José Luis Corripio Estrada, el diario Hoy ocupa un sitial de preferencia en el aprecio y admiración de la sociedad dominicana, porque nunca ha sido indiferente a sus problemas y anhelos y porque le ha servido con denodada lealtad e intensa pasión.
Ese periódico se erige como templo de buen periodismo, que no teme ni acepta presión del poder político ni corporativo, intransigente en la búsqueda de la verdad y garante de la pluralidad o del derecho a disentir, aun sea de su propio contenido.
La confianza que le dispensan sus lectores constituye el mejor y mayor activo de ese matutino que ya tiene un sitial de preferencia en el hogar, la oficina o en cualquier lugar donde llega y se queda para informar, entretener, educar, promover y defender valores.
La democracia y las libertades públicas tienen en Hoy a un defensor y promotor a carta cabal que durante 37 años ha estado en su puesto de vanguardia presto a repeler y denunciar a violadores de derechos sustantivos o depredadores del patrimonio público.
Las páginas editoriales del periódico Hoy se erigen como una gran peña de la libre expresión, a la cual acuden los ciudadanos a servir y servirse de los más variados planteamientos, sólo limitado por la ley y por el debido respeto al derecho ajeno.
El Nacional comparte el regocijo y el orgullo que embarga al diarismo y a la sociedad dominicana por el aniversario del diario Hoy, al tiempo que felicita su fundador, don Pepín Corripio, a su director Bienvenido Álvarez Vega y a todo su personal.
