Andar en bicicleta nunca pasa de moda. Lo que sí ha variado de esta práctica es que con el tiempo además de servir para dar un relajado paseo en zonas seguras, se integra a las disciplinas de ejercicio y ayuda a estar en forma.

En nuestro país lo ideal es practicarlo en espacios verdes donde se respire con más libertad y se evite el peligro de las entaponadas calles. Así se puede jugar un poco con la velocidad.

Y si no quiere andar en las calles, la opción son las bicicletas estacionarias, que se colocan en un espacio de la casa y puedes usarla sin salir de ahí, con también excelentes resultados.

Ya expertos de diferentes países han recalcado los beneficios de este ejercicio que como actividad física proporciona al individuo muchos beneficios físicos, pero como si esto fuera poco, es el mejor relajante cuando te sientes estresado y necesitas liberar tus pensamientos para planear nuevas cosas.

El ciclismo como ejercicio beneficia la salud cardiovascular, reduce el riesgo de infarto y el colesterol malo, además de fortalecer la zona lumbar.

Abarca diferentes modalidades como las de carretera, montaña y pista. Debes tener muy en cuenta para practicarlo: ponerte casco protector y rodilleras que pueden prevenir cualquier caída, elegir zonas seguras para evitar accidentes innecesarios, controlar el tiempo con tu entrenador o médico, respetar las leyes de tránsito y antes de salir, revisar y dar mantenimiento a tu bicicleta, para irte a lo seguro. Buena suerte y que lo disfrutes.

UN APUNTE

Beneficios

La práctica del ciclismo previene la aparición de hernias discales, estimula los músculos de las vértebras dorsales y el sistema inmunológico.