Empresarios
En las últimas semanas el liderazgo empresarial de Santiago ha estado activo. Su último reclamo se produjo este lunes cuando se manifestaron de acuerdo con nuestro planteamiento en el sentido de realizar un debate sobre los temas de desarrollo municipal. Este debate debía iniciar por quienes encarnan la mayor lucha por el poder local, Abel Martínez y Monchy Rodríguez.
Ambos precandidatos a la alcaldía, son quienes han encarnizado una feroz lucha por representar a su partido, pero muy tímidamente han enarbolado ideas de cómo lograr resolver los más importantes retos de la ciudad. Pero el asunto de acuerdo a la visión de los empresarios Fernando Capellán, Luis José Bonilla Bojos, Lina García, Juan Mera y otros que se expresaron a favor del debate no debe quedarse nada más en la comunidad del partido gobernante.
Esto tiene que envolver a todos los candidatos a presidir la alcaldía. Es que los desafíos de higienización, saneamiento, transito vial, reparación de calles son tan agudos que requieren de ideas bien claras. Se necesita arrojo para regresar a Santiago como la ciudad modelo por limpia y organizada.
Medio ambiente
El Ministerio de Medio Ambiente en Santiago mantiene una intensa campaña de reforestación. Qué bueno que así está ocurriendo. Cientos de árboles de diversas especies han sido plantados por ese organismo en calles avenidas y parques. Son especies duraderas, amigables con el entorno y que representan un bello paisajismo.
Lo malo de esto es que entre ese Ministerio y el Ayuntamiento no hay un trabajo armónico porque los ejecutivos municipales no comprenden de esas cosas. Han plantado especies que no se corresponden con las recomendaciones técnicas. No escuchan lo conveniente en materia ambiental y siguen marchando solos. Le recomendamos al Ingeniero agrónomo Mario Tejada que siga realizando su labor de manera adecuada, al final la ciudad se lo agradecerá.
Al fin
El encabezado responde a un aire de alivio ante la larga propaganda proselitistas de los precandidatos a alcalde del PLD. No hay callejones, calles, avenidas, barrios y urbanizaciones que no estén llenas de propaganda electoral de los precandidatos a alcalde. En los barrios las guaguas anunciadoras estremecen, mientras los hacedores de asistencialismo buscan que los peledeístas escojan a Abel o a Monchy, pero al fin eso termina el domingo. ¡!Qué alivio!!
