Duele que la Policía utilice la violencia para someter a la obediencia a alguna persona. Y más todavía cuando se trata de una mujer o, en este caso, de una adolescente de 17 años de edad. La violencia que dos agentes ejercieron contra una adolescente el domingo en Cristo Rey es de los incidentes que irritan a la ciudadanía.

La muchacha no cometió más delito, si acaso es un delito, que tratar de evitar que su padre fuera detenido por bañarse en la calle con una manguera, después que una patrulla prohibiera el uso de piscinas plásticas.

Los balnearios artificiales se han popularizado en los barrios en Semana Santa. Pero en esta ocasión, según denunciantes, una patrulla al mando del teniente coronel Leopoldo Núñez no solo impedía, sino que pinchaba las piscinas instaladas en las calles de Cristo Rey.

Al tratar de evitar que su padre fuera detenido por bañarse en la calle, aunque sin atentar contra el pudor, los agentes tomaron violentamente a la muchacha por los cabellos y le propinaron, como se observa en un vídeo que circula por las redes sociales, varios macanazos.