En medio de los perjuicios que hoy en día permanecen sobre las personas de preferencia sexual diferente, lo cierto es que una de las cosas que la mayoría discute y cuestiona, es la paternidad de parejas de un mismo sexo.

Las opiniones giran en torno a si hace daño psicológico o no a un niño, ser criado teniendo como padres a dos hombres, o a dos mujeres. Otros aluden que si un niño crece en este tipo de hogar, posiblemente sus preferencias sigan el mismo camino que la de sus padres.

La psiquiatra Rosanna Ramírez se refiere a este tipo de familias, como homoparentales y afirma que cada vez se observan con más frecuencia en nuestra sociedad, donde una pareja de hombres o de mujeres, se convierten en progenitores de uno o varios niños.

“Tener como proyecto de vida formar una familia, es un deseo natural de cualquier persona en edad adulta, por lo tanto las parejas homosexuales no son la excepción, el deseo de tener descendencia aparece también en los padres solteros, madres solteras, pudiendo utilizar varios métodos para lograrlo: una inseminación artificial, un vientre de alquiler, gestación por sustitución o sencillamente uno de los miembros tienen hijos de forma natural de relaciones pasadas”.

La profesional explica que los estudios realizados en este tipo de familias han demostrado de manera consistente que padres gays y madres lesbianas son tan capacitados como los padres y madres heterosexuales.

Las investigaciones demuestran que no existe relación entre la orientación sexual de los progenitores con la de sus hijos, como se pensaba anteriormente.

Se considera que los cambios en la forma de paternidad y de la crianza de los hijos, incluyendo en la homoparentalidad, no son en su esencia un fenómeno complementario nuevo, sino que son cambios rutinarios que se desarrollan en los núcleos familiares con el paso del tiempo y como respuesta a los nuevos retos que se debe enfrentar la familia en una sociedad cada vez más competitiva.

Estudios

Ramírez detalla que los estudios hasta el momento concluyen que el desarrollo de los niños es totalmente normal, pero también que las familias homoparentales enfrentan retos y dificultades específicas propias de su dinámica familiar.

En las familias homoparentales los valores de igualdad, tolerancia y libertad de expresión, se promueven con mayor fuerza, también presentan debilidades ligadas a la integración de la individualidad homosexual de los padres o madres, lo que los lleva a la compresión o a la negación de su homosexualidad, de ahí la necesidad de que los padres se han trasparentes frente a sus hijos.

“El entorno también es una variable importante en esta estructura familiar, en el buen desarrollo de los miembros de la familia homoparental, es necesario un ambiente facilitador e integrador”.

Afirma además que se observa mayor igualdad en los roles de género, en su mayoría los niños son muy deseados, por lo que los progenitores están más preparados y conscientes de la responsabilidad necesaria, al momento de educar a otro ser humano.

Ramírez, quien tiene su consulta en el Centro Vida y Familia concluye que en la actualidad el concepto de la estructura familiar ha evolucionado y se ha ramificado hacia nuevas formas de convivir bajo un mismo techo.

UN APUNTE

El núcleo

El núcleo familiar constituido por padre, madre e hijos ha dado paso a otros modelos de familias, hogares de padres divorciados, de un progenitor con su hijo, de parejas sin hijos o con hijos que no son hermanos consanguíneos y en este mismo sentido familias homoparentales, que son realidades visibles en