Baní.-La madre, esposa y un hijo del comerciante José Agustín Fuertes Núñez, asesinado a principios del mes de septiembre de este año, reclamaron de la Policía Nacional el apresamiento de los principales autores materiales e intelectuales del crimen de su pariente, indicando que ya han sido identificados y que han recibido informes de que se continúan cometiendo atracos, robos y otros hechos delictivos en Baní y sus comunidades.
Violeta Núñez, madre; Reina Guzmán, viuda, y Elvis Fuertes, hijo, indicaron que hasta el momento han sido apresados Junior Antonio Germán Tejeda, alias El Rubio, y Aneudys Guzmán, de 27 y 24 años de edad respectivamente, residentes en barrios de la zona norte, a quienes se les conoció el pasado miércoles prisión preventiva como medida de coerción en el tribunal de Atención Permanente del distrito judicial de Peravia.
Fuertes Núñez, quien era administrador de la estación de combustible Eco Petróleo, ubicada en la calle presidente Billlini en la salida hacia el Distrito Nacional, fue asesinado de un disparo en el pecho por dos hombres que se desplazaban a bordo de un motor en la calle Mella casi esquina Uladislao Guerrero, en momentos en que en compañía de un empleado se dirigían a depositar una indeterminada cantidad de dinero a una sucursal del Banco de Reservas en esta ciudad.
Con relación al hecho, la Policía Nacional en esta ciudad mediante una nota informativa, dijo que los presuntos autores son los nombrados Wendolin Smith Soto Díaz, alias Emil, Ángel Danyely Pimentel Binet, alias Yael, y Carpian y El Venezolano, quienes todavía están prófugos.
La muerte del comerciante Fuertes Núñez motivó que el obispo de Baní, Víctor Masalles Pérez, la Cámara de Comercio y Producción de Baní, la Confraternidad de Ministros Evangélicos de Baní y varias organizaciones de la sociedad banileja reclamaran de las autoridades civiles, del Ministerio Público, de la Policía Nacional y de otras autoridades convocar a la Mesa de Seguridad Ciudadana a los fines de elaborar un plan preventivo para disminuir el alto índice de robos, atracos, muertes y violencia en Baní.
