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Juicio de mayordomo del Papa deja más interrogantes que respuestas

Juicio de mayordomo del Papa deja más interrogantes que respuestas

CIUDAD DEL VATICANO, 7 Oct 2012 (AFP) – El juicio del mayordomo del papa Benedicto XVI, condenado el sábado a 18 meses de cárcel, deja más interrogantes que respuestas en el escándalo de la divulgación de documentos confidenciales del Vaticano que, según los analistas, no se puede dar por concluido.

Se trata de un juicio inédito, comenzando por la víctima: Benedicto XVI. El único acusado, Paolo Gabriele, declaró haber sido inspirado por “el Espíritu santo” para librar a la Santa Sede de todo “mal y corrupción”.

Aunque la iniciativa de realizar un juicio público en presencia de periodistas, por primera vez en la historia del Estado más pequeño del mundo, fue saludada de manera unánime, los analistas se interrogan sobre el carácter expeditivo del juicio, concluido en una semana, y que se limitó a examinar únicamente el cargo de “robo agravado”.

“Los instigadores en la sombra y las complicidades desestimadas, los secretos que el veredicto no reveló”, tituló en un tono muy crítico el diario Repubblica (izquierda), que se pregunta cómo el mayordomo pudo tener en su posesión “documentos médicos y análisis de sangre de Joseph Ratzinger”.

Gabriele afirma haber actuado solo, y el fiscal Nicola Picardi dijo que la investigación no permitió demostrar la existencia de cómplices exteriores.

Sin embargo, el mayordomo del Papa había hecho referencia a “unas 20 personas” que compartían sus ideas y trabajaban en diferentes servicios del Vaticano.

Aunque el juicio pone a descubierto un ambiente de descontento y frustración en el círculo cercano al Papa, que habría influenciado al mayordomo, ningún elemento corrobora la tesis de un complot organizado.

El Corriere della Sera establece una lista de preguntas: 

“Tomando en cuenta la personalidad frágil del mayordomo, ¿Alguien le “sugirió, convenció u ordenó” hacer lo que hizo?”

“Gabriele robaba documentos desde el 2006, pero comenzó a transmitirlos a un periodista en el 2011, ¿Por qué?

“¿El informe realizado por la Comisión de investigación compuesta por tres cardinales va a ser publicado?

“¿Cuántos documentos y copias siguen en circulación?”          

 “Una parte limitada de la investigación Vatileaks”                                        —

Otra interrogante: ¿La justicia del Vaticano examinará las denuncias de corrupción en la Santa Sede que figuran en algunos documentos?

Sin duda, los gendarmes del Vaticano van a necesitar tiempo para examinar los computadores de Gabriele y el gran número de documentos encontrados.

El juicio de Paolo Gabriele es “una parte limitada” de la investigación “Vatileaks”, explicó el sábado el portavoz del Vaticano, el padre jesuita Federico Lombardi.

El presunto cómplice de Gabriele, el informático Claudio Sciarpelletti, aún debe ser juzgado, y delitos más graves -como la violación de secretos pontificales o la difamación- están siendo investigados.

El juicio de Gabriele decepcionó a muchos: ¿Por qué Sciarpelletti, que debía ser juzgado junto a Gabriele, será juzgado por separado? ¿Por qué el presidente del tribunal, Giuseppe Dalla Torre, se centró estrictamente en el cargo de “robo agravado”, e impidió que cualquier otro aspecto del caso “Vatileaks” fuera mencionado?

Además, el nombre del periodista italiano Gianluigi Nuzzi, que recibió de Gabriele decenas de documentos confidenciales antes de divulgarlos en un libro, apenas fue mencionado.

Para el vaticanista Marco Politi del diario Fatto Quotidiano (izquierda), el juicio Gabriele fue “un juicio político”, “dada la voluntad del Vaticano de silenciar el caso Vatileaks”.

  

El Nacional

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