TORONTO, AP.- Kobe Bryant respondió preguntas en español e italiano, elogió la hospitalidad canadiense, mostró sus conocimientos sobre el basquetbol griego y el fútbol inglés, anunció sus planes de viajar a Filipinas y Taiwán, agradeció a los fanáticos japoneses e incluso preguntó a un reportero cómo podía decir cierta frase en mandarín.
Y todo tenía sentido. El mundo del basquetbol le pertenece a Bryant, al menos por un fin de semana más.
Unos 750 millones de personas seguirán de un modo u otro el Juego de Estrellas de la NBA que se realizará hoy domingo. Y seguramente la mayoría estará atenta a lo que haga Bryant en su última aparición en el encuentro estelar de media temporada.
La campaña que marca la despedida de Bryant está llegando a su recta final, así que el astro de Los Angeles Lakers fue el centro de atención el viernes, durante el día de prensa, y se mostró agradecido por ello.
“Simplemente me siento muy bendecido por la capacidad de jugar tantos años”, dijo. “Veinte años son mucho tiempo, así que me siento bien por ello”.
Bryant fue el jugador que más votos recibió por parte de los fanáticos que decidieron la alineación titular para el Juego de Estrellas. Se trata de un premio a su trayectoria, más que de un reconocimiento a lo hecho en la presente temporada.
A los 37 años, resulta evidente que Bryant no es ya el mismo jugador que era cuando ayudó a que los Lakers ganaran cinco títulos.
Pero durante esta campaña, ha dado destellos del talento que lo colocó alguna vez en la elite del basquetbol.
Bryant dice que se conformaría con jugar 10 minutos el domingo. Kevin Durant, de Oklahoma City Thunder, no le cree.
“Definitivamente queremos despedirlo de una buena forma”, comentó Durant. “Sabemos que él va a ser supercompetitivo”.
Con certeza, la despedida será festiva.
Decenas de periodistas se aglomeraron alrededor del estrado donde habló Bryant, incluso antes de que comenzara su conferencia del viernes, si bien algunos sólo querían tomarse una “selfie” en cuyo fondo apareciera la estrella. Bryant fue uno de los panelistas en una reunión de la NBA sobre tecnología por la mañana, para compartir ideas con ejecutivos de la liga y otros.
Además, su esposa y sus dos hijas se encuentran en Toronto, de modo que toda la familia participa de la celebración.
“Esto es muy bonito”, expresó Bryant. “Miro alrededor de esta sala y veo a chicos con los que jugaré y que ahora están rompiendo la liga. Tenían como 4 años cuando yo estuve en mi primer Juego de
Estrellas… ¿Cuántos jugadores pueden decir que han estado aquí 20 años y han visto de verdad la evolución de esto en tres o cuatro generaciones? No hay nada triste en ello. Estoy realmente feliz y honrado por encontrarme aquí y ver esto”.
También sus compañeros mostraron beneplácito.
LeBron James, de Cleveland Cavaliers, es probablemente el mejor jugador del mundo. Dwyane Wade, de Miami Heat, ostenta más anillos de campeón que cualquier otro participante en el Juego de Estrellas de este año, junto con Bryant. Kyle Lowry y DeMar DeRozan, de Toronto Raptors, cuentan con el apoyo de los fanáticos locales, y Stephen Curry, de Golden State Warriors, fue el Jugador Más Valioso de la temporada anterior, en la que se coronaron los Warriors.
