La alimentación adecuada es importante en las diferentes comidas del día, pero lo cierto es que abundan las personas, adultas y jóvenes, que se quejan de malestares digestivos después de las cenas, talvez producto de una mala elección de lo que ingieren o de una hora que no es la mejor para este último alimento del día.
Digestión lenta con la sensación de algo pesado en el estómago, dolores incómodos con gases estomacales, acidez, reflujos gástricos y otros muchos síntomas que pueden llegar hasta el vómito, son los que escuchamos en las quejas de muchos a diario.
Lo ideal para tener un sueño confortable –explica la doctora Taiana Ubiñas, nutrióloga clínica- es evitar comer grandes cantidades de alimentos, cuidar la carga nocturna es 1A, también evitar alimentos muy copiosos o cargados en grasas y azucares, evitar las harinas blancas, los refrescos de cola, de todas formas si logramos hacer la cena en su horario adecuado que debe ser 2 horas antes de acostarnos probablemente evitemos esas desagradables sensaciones.
Ubiñas destaca que primero es importante destacar que el proceso de la digestión inicia en la boca, desde la masticación de los alimentos hasta seguir su camino por el tracto digestivo y puede durar de 24 a 72 horas en moverse por todo el, dependiendo del tipo de alimento, cantidad de ellos e incluso condiciones de salud que tenga el paciente que puedan enlentecer aun más el proceso.
Detalla que cuando una persona es sana, sin ningún trastorno a nivel de este sistema, que tiene alguna situación con digerir los alimentos, debe verse qué cantidad de alimentos, qué calidad de alimentos y si hizo un buen proceso de masticar para convertir la comida en partes más pequeñas que sean más fáciles de digerir.
“Si la persona tiene una condición de salud, el profesional del área, que es el gastroenterólogo, toma las medidas y orientaciones especificas para el caso en particular”, dijo.
La edad no es determinante
Ubiñas, quien tiene su consulta en el Centro Nutrifit, afirma que la sensación de mala digestión puede darse a cualquier edad, pero es una realidad que en los adultos mayores sea de forma más común y por múltiples razones orgánicas que van desde falta de piezas dentales que pueden afectar la masticación, disminución en la producción de saliva, disminución del movimiento esofájico, entre otros.
En ese sentido aconseja que por la noche nunca se consuman los chocolates, los dulces, refrescos de cola, cafeína, carnes procesadas, alimentos picantes, etc.
Si la persona ya tiene una condición gástrica algunos alimentos pueden provocarle dolores de estómago, gases y otros síntomas, y estos son: los cítricos, alimentos picantes, muy cargados de grasas, alimentos poco cocidos, muy condimentados, lácteos, harinas blancas, vegetales como la lechuga, el repollo, el brócoli, tomates, frutos como la naranja, kiwis, limón, manzana verde, piña y otros.
La leche, el café, los jugos de naranja, son los alimentos que muchos mencionan y a los que le atribuyen sus malestares digestivos. ¿Es mito o verdad?
“Como dije anteriormente, sí, esto es positivo, pero es más en esos pacientes que tienen ya orgánicamente algún tema con el tracto. Una persona sin ninguna condición no ve esos síntomas”.
A la pregunta de qué recomienda a la hora de la cena, que dé seguridad de buena digestión y como añadidura, buen descanso, la nutrióloga clínica responde:
“Primero, cenar temprano, unas 2 horas antes de acostarnos, segundo cuidar la porción de los alimentos, la cena debe hacerse siempre, pero ligera. No consuma alimentos fritos ni muy condimentados, evite los alimentos muy dulces y recuerde masticar bien. Una sopa, un puré, una crema pueden ser buenas opciones”.
EL DATO
El camino de los alimentos
El proceso de la digestión inicia en la boca, desde la masticación de los alimentos hasta seguir su camino por el tracto digestivo y puede durar de 24 a 72 horas en moverse por todo el, dependiendo del tipo de alimento, cantidad de ellos e incluso condiciones de salud que tenga el paciente que puedan enlentecer aún más el proceso.
