Opinión

Nexos con China

Nexos  con China

Veintidós países –incluyendo el nuestro-, de los 193 miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), están aún pendientes de establecer relaciones diplomáticas con China. Primero, tienen que romper con Taiwán, que no es miembro de la ONU, reivindicada por China como una de sus provincias.

Irrefutable realidad representada en la primera concentración poblacional, segunda economía (después de Estados Unidos) y tercera extensión territorial (seguida por Rusia y Canadá).
Formalizar relaciones diplomáticas con China proporciona un escenario adecuado para expandir el comercio en el dinámico y creciente mercado asiático, incluyendo a la isla de Taiwán, que es uno de los principales socios industriales de China, con la cual tenemos relaciones.

Rescatamos, además, un invaluable antecedente en esta materia, como la acreditación de un ministro consejero chino en República Dominicana, de acuerdo a datos obtenidos en la obra Política Exterior Dominicana 1844-1961, escrito por Mu-Kien Sang Beng. Refiere el Tratado de Amistad firmado el 11 de mayo de 1940, en Ciudad Trujillo.

Tres años después, en 1943, el ministro consejero de la República de China, acreditado en Cuba, presentó credenciales ante el gobierno dominicano (del libro China, el ascenso del dragón, de Luis González).

Sin embargo cuando Mao Tse Tung proclama la República Popular China (RPCh), Trujillo decide establecer relaciones con la Taiwán de Chiang Kai Check.

El comercio entre China y Latinoamérica ha crecido, de manera sostenida, en 47%, durante los últimos años, sin que República Dominicana se haya favorecido de un mercado que procura suplirse de materia prima y productos procesados en esta región. Las operaciones de compra y venta entre ambas partes rondan los 47,900 millones de dólares promedio cada tres meses.

China mantiene un intercambio comercial con Dominicana calculado en 2,400 millones de dólares en lo que va de año, y se espera que mejore con el turismo, la música, el café y el ron procedente de nuestro país, según datos de la Oficina de Desarrollo Comercial de la RPCh, en el acto de apertura de la casa de China, celebrado el 31 de octubre del año en curso.

El salto en las relaciones bilaterales ha sido cualitativo y cuantitativo. Sin embargo, la falta de relaciones diplomáticas limita seriamente la participación de nuestro país en una avenida comercial con amplias posibilidades. Podemos vender a China mucho más ferroníquel, cigarros, cacao, banano y ron, entre otros renglones, como ocurre desde hace casi una década.

El Nacional

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