SANTIAGO. Las lluvias continuaron ayer en la tarde y noche con fuertes precipitaciones en Santiago, Moca, La Vega, Puerto Plata y otras localidades del Cibao, pero los organismos de socorro informaron que no se han reportado nuevos deslizamientos de tierra ni daños materiales o humanos.
En varias calles de la ciudad de Santiago el tránsito vehicular disminuyó momentáneamente cuando las vías se convirtieron en ríos. Sin embargo, de acuerdo al reporte de hoy del Comité Provincial de Prevención, Mitigación y Respuesta ante Desastres (PMR), las lluvias aunque intensas no provocaron otras inundaciones en zonas vulnerables.
Aunque las inundaciones fruto de los aguaceros caídos en las últimas semanas han provocado, además del deslizamientos de tierra en algunas localidades la saturación de los suelos, lo que ha provocado que decenas de agricultores se vean impedidos de plantar diversos rubros agrícolas en la zona.
Con los suelos saturados los deslizamientos de terrenos se han convertido en el principal foco de atención y son un verdadero peligro, advirtió hoy la el la Defensa Civil. El subdirector Nacional de la Defensa Civil Francisco Arias recordó a las personas residentes en el Bajo Yuna y en otras localidades propensas a inundaciones y deslizamiento a extremar las precauciones debido a que la Oficina Nacional de Meteorología informa de que continuarán las lluvias y los suelos se encuentran muy sensibles por la cantidad de agua caída.
Los aguaceros de los últimos días provocaron del estudiante universitario de término en contabilidad en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, centro regional de Santiago en el sector el sector el Alto de San Rafael, La Otra Banda de Santiago a causa de un derrumbe de tierra. La defensa Civil de Santiago fruto de ese hecho remitió un informe a la alcaldía municipal solicitándole intervenir esa zona vulnerable y otras del municipio.
Situación del agua potable
La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (CORAASAN), aseguró que garantiza el nivel de calidad de agua servida para el consumo humano pese a las lluvias que se han registrado durante los últimos días en la Cordillera Central.
Expuso que habitualmente las lluvias elevan la turbidez del agua captada en el complejo Tavera-Bao por el arrastre de sedimentos propios de la erosión del suelo que podría reflejarse en un color inusual.
Héctor Jáquez, gerente de Operaciones y Mantenimiento, explica en ese caso el proceso de potabilización se hace más lento, obligando a disminuir la cantidad de agua ofrecida.