Quito, (EFE).- El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció este viernes que la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), situada en la Mitad del Mundo, al norte de Quito, se convertirá en un centro de estudios superiores indígenas.
En un encuentro en el municipio de Latacunga donde se firmó un decreto para la creación de la Secretaría de Educación Intercultural Bilingüe, el mandatario hizo el anuncio, después de que en la víspera expresara que el edificio de Unasur era un “nuevo elefante blanco” al que habría que buscarle otro destino.
“Vamos a tener el centro de las universidades indígenas en un edificio que ya no sirve, carísimo”, que costó unos 45 millones de dólares, dijo Moreno sobre la actual sede de la Unasur, en futurista complejo arquitectónico que ha ganado algunos premios internacionales.
“Tenemos que hacer el trámite a la Unasur para que nos devuelva el edificio, para que ahí esté la universidad indígena”, reiteró Moreno en declaraciones reproducidas por la Secretaría Nacional de Comunicación (Secom).
Antes, en un su cuenta oficial de Twitter, la Secom había colgado el siguiente texto atribuido a Moreno- “Tendremos el Centro de Educación Superior Indígena en el edificio de la Unasur. Haremos el trámite de su devolución, ya que no se ha cumplido ninguna tarea. Pasaremos a la Unasur a otro espacio”.
La sede de Unión, construida durante el Gobierno del expresidente Rafael Correa, excorreligionario de Moreno convertido ahora en su más enconado rival político, alberga la Secretaría General del organismo que no tiene titular desde la salida en diciembre pasado del expresidente colombiano Ernesto Samper.
El edificio, considerado el símbolo de la integración para el desarrollo regional, ha sido entregado por el presidente Moreno al movimiento indígena “para que funcione allí la sede de la Universidad Pluricultural de las nacionalidades y pueblos Amawtay Wasi”, escribió el dirigente José Atupaña.
Sobre esa base, Correa, que reside en Bélgica, reaccionó y se lamentó de que el movimiento indígena avale la decisión de Moreno. “¿El Movimiento Indígena será cómplice de la destrucción de UNASUR? ¡No lo puedo creer!”, escribió Correa en su cuenta de Twitter, red que suele usar para referirse a la política interna de su país.
Apawci Castro, portavoz de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie,) confirmó a Efe el anuncio por parte de Moreno, que valoró positivamente, así como “el diálogo que ha emprendido” con las nacionalidades indígenas, que espera que se concrete en medidas específicas.
Aunque el jueves manifestó que para el traslado del organismo panamericano a otra sede se debe contar con la aprobación de sus miembros, una docena de países de la región, Moreno no precisó si se han puesto en marcha gestiones para convertirla en un centro universitario o cuándo podría inaugurarse.
“La Unasur lastimosamente no está funcionando por la falta de consenso de los países que la componen, (lo que) ha provocado la mitad de ellos la abandonen”, señaló el jueves el presidente ecuatoriano en referencia a Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú.
Esos países anunciaron en abril que abandonarían Unasur hasta que se garantice un funcionamiento adecuado de la organización, descabezada desde hace más de un año por discrepancias entres sus miembros.
Moreno defendió el espíritu de integración que comporta el organismo multilateral, “una buena idea que lastimosamente, por fallas humanas, no se ha cristalizado, por fallas ideológicas”. “En algún momento habrá que considerar buscarle otro destino, sin que pensemos en la posibilidad de que se cierre Unasur. Habrá que asignarle otro edificio (a la organización)”, concluyó.
