MEXICO. AP. La película “El Profeta” provocó en Salma Hayek una revolución interna. La actriz mexicana confesó que si bien el filme animado basado en el libro del famoso poeta libanés Gibrán Jalil Gibrán, que hace seis años se aventuró a producir, es el proyecto más difícil en el que le ha tocado trabajar, también es el que mayor sanación espiritual le ha aportado.
“La película no fue el éxito que yo hubiera querido, y sin embargo, aunque me causó muchos problemas, nunca me eché para atrás, porque era parte de decir: ‘Yo creo en esta película”’, dijo Hayek el domingo, durante un breve encuentro con la prensa en la Ciudad de México, tras desfilar por la alfombra roja para promocionar el filme que llegará a las salas de cine del país el viernes.
