Retos de Danilo y Luisín
Desde el mismo momento que el presidente de la República Danilo Medina le confió la política deportiva de su gobierno al licenciado Danilo Díaz, el autor de esta Tribuna de la Verdad asumió el compromiso de defender con ideas y recomendaciones la gestión del actual ministro de deportes.

Acogí el señalamiento que hiciera Danilo Díaz: “Les pido a los medios de comunicación su colaboración, pero también, esta institución estará abierta a las críticas constructivas”.
Pienso que en la rendición de cuentas, el presidente Medina mostró su satisfacción con los resultados del deporte. Es innegable que el ministro Díaz ha sabido dirigir el barco sin aguas procelosas, pero en lo adelante, tendrá que asumir una dura postura con algunas federaciones, aunque tenga que afectar a personas que aprecia en lo personal.
Es un rumor público, que el presidente de la Federación de Baloncesto, Rafael Uribe Vásquez, se dedica a prestar sumas importantes de dinero a presidentes de federaciones. No sé si el joven dirigente comete acto de usura, pero de ser cierto, es indispensable que el ministro intervenga para que se detenga esa práctica dañina, que de seguro no cuenta con su aprobación y mucho menos con el de la Cámara de Cuentas.

El deporte se parece en algunos aspectos a la política. Así como existe una comunidad política, hay una comunidad deportiva que paga sus impuestos y exige transparencia. Otro caso que nuestras autoridades deportivas están compelidas a observar, es el del presidente de la Federación de Béisbol, Héctor -Tito- Pereyra. A veces el jefe de la Fedobe me hace recordar al insigne teórico Giovanni Sartori, quien desarrolló el concepto de Videopolítica en su famoso “Homo Videns”, Mucha televisión, mucha imagen y cero actitud para cumplir con los compromisos.

Desde cuando el doctor Jaime David Fernández Mirabal era ministro de Deportes, ha sido una queja constante y es un secreto a voces, que esa entidad ha sido de las que más problemas ha presentando para liquidar correctamente los recursos que recibe.

La comunidad deportiva está huérfana de los informes económicos de los famosos Clásicos Mundial de Béisbol que envuelven tantos millones, además de la inversión que hace Miderec, a través del gobierno central. Los rumores en torno a esa federación y su presidente no son buenos.

La permisividad tiene un límite. El presidente del Comité Olímpico Dominicano, que tantas veces “le ha salvado la campaña” a muchos federados, debe de intervenir con dureza, aplicando un régimen de consecuencia, aunque eso le cueste el voto para las elecciones de diciembre en el COD.

Luisín Mejía Oviedo es el interlocutor por excelencia para defender a las federaciones y sus conquistas, pero también para sancionar las inconductas. ¿Qué espera pues, que le explote la bomba en sus pies, precisamente ahora que es miembro del Comi