Los problemas de la Autoridad Metropolitana del Transporte (Amet) no son solo los tediosos y mayúsculos tapones provocados en las intersecciones cuando sus agentes sustituyen los semáforos para controlar el tráfico de vehículos. Acento.com ha detectado que la entidad incumple con el artículo 5 de la Ley de Libre Acceso a la Información Pública al no disponer de un listado de suplidores actualizado ni de una relación de beneficiarios de programas asistenciales que se financian con fondos públicos. La documentada violación dista mucho de la transparencia que debe normar la operación de todas y cada una de las entidades públicas.
Según la publicación, la Amet cuenta con una relación de suplidores del año 2013, además de carecer, como ordena la ley, de un centro de intercambio y atención al cliente o usuario para consultas, quejas y sugerencias.
La entidad, para resaltar su eficiencia, suele hablar de las multas y otras acciones contra los violadores de la ley de tránsito. Sin embargo, ahora no basta con que explique, sino con que actualice el portal digital, como manda la ley, con las informaciones correspondientes. Para despejar las sombras.
