El Segundo Tribunal Colegiado de Santo Domingo dictó anoche sentencia absolutoria a favor del teniente coronel retirado de la Policía Manuel Antonio Méndez Guzmán, y de otros tres acusados en la muerte de Miguel Ángel Báez de la Paz (Miguelin), hecho ocurrido el 2 de febrero de 2005, en el sector Isabelita.
El tribunal, presidido por el magistrado Víctor Mejía Lebrón, sustentó la decisión en que ninguna de las pruebas presentadas por el ministerio público y los autores civiles resultó vinculante como para comprometer la responsabilidad penal y civil de los imputados.
El tribunal decidió, además, condenar al pago de las costas civiles del procedimiento a la parte querellante a favor de los abogados de la defensa.
Además de Méndez Guzmán fueron absueltos de responsabilidad la señora Milagros Antonia Echavarría Flores, esposa del occiso; el cabo de la Policía José Manuel Echavarría Flores y el mecánico Jhovanny Sánchez Roa.
Los imputados habían sido favorecidos con sendos autos de No Ha Lugar, dictados por la Corte de Apelación y del Tercer Juzgado de la Instrucción de Santo Domingo, en el 2006.
En aquella ocasión la Corte de Apelación, integrada por los magistrados Olga Herrera Carbuccia, Hiroito Reyes y Carmen Fortuna Belliard, declararon además la extinción de la acción penal del proceso y el cese de las medidas de coerción.
El oficial retirado había sido involucrado en el crimen por una sarta de envidias y mentiras.