El director ejecutivo de la secretaría de asuntos municipales del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Waldys Taveras, considera la Liga Municipal Dominicana (LMD) como un botín de 75 millones de pesos al año, razón por la cual libran una lucha los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Revolucionario Dominicano (PRD).
“La ambición desmedida y el apetito clientelar de los miembros de las cúpulas partidarias del PLD y el PRD los lleva a sostener una rebatiña por alzarse con el botín presupuestario de la LMD, equivalente a dos millones y medio de pesos mensuales”, señaló el exvocero perremeísta en el Ayuntamiento del Distrito Nacional.
En un documento de prensa, Taveras señala que la Liga es inoperante, desacredita la actividad política y denigra la administración pública, “llevándola a los niveles de aparentar un botín en manos de asaltantes”.
Taveras expresó su pesar de que destacados profesionales, con sobrada experiencia en la administración municipal y con ganadas credenciales logradas por años de sacrificio y servicio en la municipalidad y en la administración pública, se vean impedidos de presentar a los alcaldes sus propuestas de gestión para desde la LMD hacer eficientes y transparentes los gobiernos locales.
“Es una desconsideración a esforzados dirigentes de los municipios del país, que han sido elegidos por el voto de sus conciudadanos para ocupar la posición de alcaldes y en consecuencia representantes de sus municipios”, sostuvo Taveras,
Se quejó que desde cómodas oficinas en la capital o en lujosos complejos turísticos consideraran a los alcaldes marionetas e incapaces de ejercer sus atribuciones para votar por un candidato en la LMD.
Manifestó que con eso se se le conculca el derecho de los alcaldes, a los cuales la ley les otorga el derecho de votar por una de las propuestas de gestión.
Puso de ejemplo al PRM, donde afirmó que “estamos obligados a promover y practicar la democracia y donde cada quien tiene que ejercer las funciones para las que fue electo, manteniendo siempre la disciplina partidaria de que las minorías se someten a la voluntad de las mayorías”.
Huacal de botellas
Taveras propugnó por transformaciones en la LMD, al considerar que ese organismo no puede seguir siendo un “huacal de botellas políticas, pero tampoco se debe convertir en un nido de teóricos, que desde la capital quieran señalar recetas para los municipios del país, sin conocer su realidad”.
