Las sandalias negras
En este hoy de mediados de noviembre, con tantas noticias negativas, prefiero entregarle un extracto de este relato atribuido en las redes a Gabriel García Márquez, pero es de la autoría de la escritora puertorriqueña Maribel Hilerio. Búsquelo completo en la red.
“La última vez que le regalé algo a mi madre, fueron unas sandalias negras, se las estrenó al otro día, entonces le pregunté:
¿Por qué las has estrenado tan rápido? Me contestó:
¿Y si me muero mañana?… las tendría que estrenar otra persona. ¡Son para usarse ahora! Dos meses después, partió a su última morada.
Hoy volví a recordar las sandalias negras… y me pregunté: ¿Qué estamos esperando para estrenar?
Un día, en la comida, escuché a mi cuñada decirle a mi suegra:
¡Ay, mamá… no saque su vajilla bonita, se le puede romper! Mejor déjela para otro día especial. A lo que mi suegra contestó:
No, hoy es el día especial, los importantes somos nosotros, no los invitados; o qué, ¿quieres que te la deje cuando yo muera?
¡Cuanta razón tenía! ¿Qué es realmente un día especial? Cuando la vida se vive una sola vez.
¿Cuánta gente llegó hasta hoy sin decir lo que quiso, sin ponerse lo que quería, sin regresar a algún lugar, sin viajar, o sin pedir perdón?
¿Tú sabes los amores que jamás fueron… por esperar un poco más a decirlo? ¿Los sueños que se quedaron en sueños… por esperar una mejor oportunidad? ¿Y si no llega mañana? ¿Qué estás dejando sin estrenar? ¿A quién dejaste para que otro amara? ¿A quién debiste darle una oportunidad? ¿Qué aventura dejaste sin hacer?
El mañana no existe… es sólo una esperanza. Sólo nos queda el h.
Hoy me acordé de sus sandalias negras, y me dio “vergüenza” porque yo quería estrenarme unos mocasines de colores y por miedo a que se mojaran ¡no me los puse! ¿Y qué si se mojan?… que se sequen.
¿Y qué si se rompen?… los usé. Y tú… ¿Qué tienes sin estrenar?
¿Y si fuera tú última vez?”. Sería por mucho “algo más que salud”.