La gerencia general de Dream Casinos Corporation SRL apeló la sentencia que ordena la libertad del empresario italo-canadiense Antonio Carbone, investigado por el Ministerio Público y las autoridades de Canadá por escándalo internacional de que fue objeto ese consorcio y por el intento de homicidio en diciembre del 2014 contra uno de sus ejecutivos.
La apelación contra la sentencia del Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, que ordena la libertad de Carbone, fue hecha por el gerente general de Dream Casinos Corporation SRL, a través de sus abogados Abel Rodríguez del Orbe y Manuel Pérez.
Báez Guerrero se quejó de que a Carbone se le otorgara la libertad con la simple colocación de un grillete y sin la exigencia de que aportara un domicilio.
Declaró que los jueces ni siquiera tomaron la precaución de establecer un límite de distancia entre él y Carbone, lo que a su entender pone su vida en serio peligro.
Carbone está acusado, entre otras cosas, de estallar el carro de Báez Guerrero con una bomba incendiaria, el 1 de diciembre del 2014, en el sector Los Cacicazgos de la capital.
Fue puesto en libertad al variarle la medida de coerción de un año de prisión que le impuso en el 2015 el juez Alejandro Vargas, del Tribunal de Atención Permanente del Distrito Nacional.
Su libertad fue ordenada a pesar de los esfuerzos que hicieron los abogados de Báez Guerrero, que incluso recusaron al presidente del Tribunal, Rafael Antonio Pacheco y no no obstante a que el Séptimo juzgado de la Instrucción anteriormente había ratificado la medida de coerción y su envío a juicio de fondo.

