Hipólito y Miguel
Señor director:
Me preocupa la suerte del PRD, porque mi padre fue perredeísta y yo lo soy también, aunque en los últimos años no he hecho política activa. Es lo que me lleva a no justificar en modo alguno la actitud de Hipólito Mejía y la de Miguel Vargas. A veces no sé si calificarlos como compañeros del partido.
Ellos no recuerdan que los compañeros de la base llevan 8 años sin un empleo y no es cierto que los peledeístas los van a colocar en el Estado.
Yo sé lo que se pasa cuando no se tiene empleo, pues estuve sin empleo durante un buen tiempo, y puedo decir que los peledeístas solo se preocupan por su gente.
Yo tuve que hacer una gestión privada para que me colocaran en el empleo que tengo, que no es el mejor, porque es un negocio pequeño, pero gano algo. Tuve largo tiempo sin producir un solo centavo, y así les ha sucedido a muchos compañeros, que están vendiendo naranjas por unidad o echando días.
Los compañeros Hipólito Mejía y Miguel Vargas, parece que no toman en cuenta eso, y ocurre quizás porque ellos sí tienen resueltos sus problemas.
A ellos no les importa, entonces, tirarse las cajas y los cajones mientras los compañeros de la base, como dice el pueblo jalan aire.
Creo que Miguel Vargas, debe reflexionar. Si el PRD pierde las elecciones, le van a echar la culpa y si gana sin él, se verá que él no es tan necesario.
El compañero candidato tampoco está en la mejor posición, porque, si el partido pierde, dirán que es él quien tiene un alto nivel de rechazo. Si gana, él será presidente, pero no tendrá un partido compacto que lo respalde, cosa que necesita mucho un gobernante en el día de hoy.
Estos son momentos en que solo la unidad partidaria les permite a ambos quedar bien y salir bien parados después que pase el proceso electoral.
Hipólito Mejía, en su condición de expresidente, debe entender que él necesita en su campaña sangre nueva y que eso no se consigue en los colaboradores que él tiene a su alrededor y que fueron grandes figuras en el gobierno 2000-2004.
Que recuerden que tienen que comportarse como estadistas, no como políticos que buscan puntos y experiencia y pretenden comenzar ahora. ¿No han medido la responsabilidad que tienen?
Atentamente,
Lic. Aldo Carrasco
Santo Domingo

