El vicepresidente de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños Guzmán, insiste en la necesidad de modificar la ley de compras y contrataciones para eliminar las “distorsiones e inobservancias sistemáticas” en las licitaciones y operaciones del sector público. Ante los sucesivos escándalos de corrupción desde antes y durante la lucha contra la pandemia del coronavirus es más que lógico que algo tendrá que hacerse. La ausencia de normas no debería ser una excusa para justificar sobrevaluaciones ni asignaciones sospechosas. Pero si la única forma de enfrentar escándalos que tanto lesionan al contribuyente es la reforma de la ley 340-06, el Gobierno no debe demorar el paso, sobre todo ahora en que la lucha contra el coronavirus ha generado tantas suspicacias. La solicitud de Finjus tiene mucho fundamento para tomarse en cuenta.

