margarita brito

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La familia ha sido clave para este reconocido humorista, recientemente reconocido con el premio Gran Soberano, que otorga la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte).

Al participar en el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, César Augusto Victoria Suazo (Cuquín) expresó que “nunca se me ha subido la popularidad. Nunca me salí de lo que era el trato con mi familia. Mis hijos estaban por encima de todo”.

Sin embargo destacó que conservar la familia tuvo mucho que ver con la tolerancia de su esposa, aunque no era un hombre de estar haciendo cosas fuera de lo común, pero reconoció que en El Show del Mediodía tomaba sus traguitos

Participar en un encuentro con Cuquín Victoria es saber que se va a reír, porque al humorista los chistes le salen con naturalidad y la risa es inevitable.

Así entre anécdotas y cuentos de distintos momentos de su carrera, confesó que no le gustan los homenajes póstumos y que cualquier homenaje a su figura prefiere que se lo hagan en vida. No obstante destacó que la crónica le ha tratado bien, reiterando su satisfacción por la entrega de El Gran Soberano y las demostraciones de afecto que recibe en las calles.

Victoria, que se inició en los llamados 12 años de Balaguer, junto a los humoristas Freddy Beras Goico, Milton Peláez, Felilpe Polanco y otros, al ser cuestionado dijo que no fue amenazado por el humor político que hacían, en el que caricaturizaba al entonces presidente Joaquín Balaguer, pero sí recibió una llamada de atención. Destacó que al parecer el presidente gustaba de sus personajes, ya que siempre le invitaba a los saludos de Navidad, al cual asistió en la tercera oportunidad. Cuquín reconoció que a veces se pasaban, “metían la pata”, debido a las improvisaciones que se veían obligado a hacer con cuatro comedias al día.

Bien informado

Cuquín no usaba celular, pero ahora lo lleva consigo…apagado. Eso no signica que no se mantenga informado, ya que al levantarse, entre las 9:30 y 10:00 de la mañana, lo primero que hace es leer los periódicos y conectarse a las redes Facebook y twitter. “Con un celular me siento como un gallo agarrado con un block en el cocote, sin libertad”, afirma.

Graduado de ingeniero civil en la Universidad Central del Este, luego de varios años de haber interrumpido sus estudios para dedicarse al humor, narró el sacrificio que fue viajar a diario a San Pedro de Macorís y los sábados a las 7:00 de la mañana. Dijo que consiguió un picoteíto construyendo unas calles de La Romana y un edificio de la universidad estatal.

El humorista fue cuestionado entre otros temas sobre las dificultades en el teatro, la posibilidad de hacer un programa diario de radio, los chistes machistas, el cine de humordominicano y los personajes que más han gustado y perdurado en el tiempo. Indicó que en el país se puede vivir del humor y del cine, pero no del teatro, debido a que montar una obra toma de tres a cuatro meses de ensayo, para luego presentarla un fin de semana y quizás dos no es bien remunerado. De sus personajes recordó a Chochueca, quien a diario revisaba los listados de la funeraria Blandino para acudir a ayudar en el velorio, para luego recibir la ropa del difunto y también el de Vicente el Imprudente.

Aseguró que a diferencia del teatro, donde hay muchas dificultades, en la televisión y el cine es diferente, aunque éste último requiere ensayos de 18 a 20 horas diarias durante la filmación. Resaltó que en el país la Ley de Cine abre una gran oportunidad y que este es el momento para que arranque, ya que hay oportunidades de trabajo para artistas de diferentes áreas y técnicos en general. Señaló del cine de humor que se hace en el país, que eso es lo que vende y que aquí se está iniciando y precisó que fue así que comenzaron Cuba, México y Argentina.

Con cinco proyectos para hacer películas, para hacer teatro y su trabajo en Chevere Nights, Victoria no está interesado en hacer un programa diario por el trabajo que implica.