BRUSELAS. AFP. El incumplimiento por España de los objetivos de déficit presupuestario es «grave» y la decisión de Madrid de no respetarlos puede acarrearle sanciones, advirtieron el lunes varios responsables europeos.
Ese incumplimiento en las cuentas es «serio, grave», indicó Amadeu Altafaj, portavoz del Comisario Europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn.
Tomando desprevenidos a sus socios europeos, el jefe de gobierno español Mariano Rajoy anunció el viernes, tras una cumbre europea, que el déficit público de España sería de 5,8% del PIB en 2012, y no de 4,4% como estaba previsto en su programa para llegar en 2013 a un déficit de 3%, el máximo autorizado por la UE.
Rajoy no había informado a nadie de su intención de romper el Pacto de disciplina presupuestaria que había firmado pocas horas antes con 24 de sus socios de la Unión.
El presidente del ejecutivo español alegó en conferencia de prensa que no lo hizo porque se trataba de una «decisión soberana» adoptada por los españoles.
Estas declaraciones «no cayeron bien» en Bruselas, indicó el lunes una fuente informada. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y Olli Rehn «están de momento en un estado de ánimo de no negociar nada y de abrir un procedimiento» de sanción por déficit excesivo, según la fuente.
El déficit público de España de 2011, que debía ser en torno al 6% del PIB, se elevó finalmente al 8,5%, lastrando así la situación para 2012.
Hasta noviembre, se decía que España iba a estar ligeramente por encima del objetivo» de ese 6%.