¿Qué Pasa?

Dejarlos equivocarse también es enseñar

Dejarlos equivocarse también es enseñar

Con el inicio de la temporada escolar llegan las tareas, aquellas que tienen el propósito de reforzar el aprendizaje y detectar en lo que el niño aún está “flojito”.

Es importante que los padres acompañen y guíen a sus hijos en el aprendizaje, pero a veces ese apoyo se mal entiende, y muchas veces papá y mamá  recurren a hacerles las tareas,  por desesperación o cansancio; y esto tiene sus consecuencias, y no nos referimos al llamado de atención de la maestra al darse cuenta, es algo que va más allá.

Para la psicóloga Norma Duarte el rol de los padres debe fundamentarse a ayudar a su hijo a desarrollar habilidades, “competencia que desarrollen la autonomía y con esto la autoeficacia, autoestima, habilidades para la vida misma o por el contrario deseo ofrecerle a mi hijo/a, una plataforma donde ellos no puedan resolver problemas por su propio criterio”.

En ese sentido, puso como ejemplo que, cuando un padre le escribe la respuesta a su niño, este está invalidando “el desarrollo cognitivo que abre paso a las diferentes capacidades para ejecutar una acción”.

Psicóloga Norma Duarte.

“Con este ejemplo, lo que usted hace como padre es lo siguiente: Limita la capacidad de atención, de creatividad, de memoria, la inteligencia disminuye o simplemente se atrofia su cerebro en potencia y vulnera de manera que se está  violentando su proceso normativo y evolutivo de su hijo,  entonces,  usted pudiera hacerse una nueva  pregunta: ¿Estoy consciente de las  consecuencias que provoco en la vida de mi ser querido, cuando yo asumo las responsabilidades  de mi hijo  y en verdad eso es lo  que  yo deseo y quiero para mi hijo?”, manifestó la doctora, CEO del Centro Neuropsicológico Nuevo Comienzo.

Muchos padres asumen que evitar que los niños se equivoquen es una forma de protección, pero es importante que estos cometan errores mientras  hacen sus deberes escolares.

La docente e Investigadora de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) sostuvo que es valioso y significativo el dejar que los pequeños cometan sus errores, pues, solo de esa manera se llega a la resolución de problemas.

  “Y es cuando se consolida el desarrollo de las áreas prefrontales encargadas de las funciones ejecutivas o superiores, las mismas que facultan al ser humano para la consecución de objetivos y metas claras. Es aquí que se consolidad el principio de la toma de decisiones acertada, en otras palabras, a los procesos de aprendizajes significativos”.

 Sin dependencia

La especialista enlistó aquellas herramientas en la que los padres pueden apoyar sin generar dependencia académica.

-Tener los recursos disponibles que su hijo/a necesita.

-Crearle un hábito de estudio saludable.

-Explicar de acuerdo a la edad y estado del niño, con un lenguaje  acorde a su edad y grado académico.

-Ofrecer recompensas de palabras motivadoras, como, por ejemplo: “Cuando un niño diga que no sabe hacerlo y entre en una frecuencia negativa, el padre de brindar palabras significativas y de valor, como: ‘Yo sé mi hijo que tú puedes; estoy orgulloso de ti; lo estas logrando; lo estás haciendo bien. Siempre recordándole que mañana lo harás mejor que hoy’”, destacó.