Protocolo de contingencia –
El pleno de la Junta Central Electoral (JCE) aprobó el viernes un Protocolo de Contingencia en los colegios electorales que ayuda a reforzar el andamiaje de seguridad y transparencia y a despejar dudas sobre la garantía de pulcritud durante el proceso de votación del próximo domingo.
Ese manual de prevención establece que si al momento del escrutinio se produce algún fallo técnico que no pueda ser resuelto en 20 minutos, se procederá al conteo manual de votos en los tres niveles de sufragios.
También, por las mismas razones se procedería a cumplir con el proceso de votación basado en un padrón de electores físico, en vez de electrónico, con lo que quedaría cubierta cualquier eventualidad de carácter técnico.
Como parte del programa de contingencia se incluye la distribución de manera estratégica de unos 600 equipos de escrutinio para atender posibles urgencias, así como la asignación de helicópteros en cada región del país para suplir materiales y enseres a colegios electorales que lo requieran.
La JCE ha establecido protocolos para afrontar situaciones de emergencia durante el día de la votación que incluye eventualidades tales como interrupción de la energía eléctrica y falta de señales para la transmisión de los resultados de las elecciones en cada recinto.
Se entiende que en algunos de los más de 16 mil colegios electorales puedan producirse inconvenientes técnicos o de naturaleza logística, por lo que alivia saber que la JCE ha previsto formas de afrontarlo en tiempo real y de conformidad con la ley.
El señalamiento de que el conteo de votos sería manual en caso de que fallen los equipos electrónicos debería llevar alguna tipo de tranquilidad a quienes aún temen que antes, durante o después del proceso de votación se produzca algún incidente mayor que trastorne los resultados electorales.
El tribunal de elecciones ha dado claras notaciones de tener férrea voluntad para organizar, montar y arbitrar unas elecciones matizadas por la transparencia y la celeridad en los resultados de las votaciones, teniendo en cuenta que la voluntad del elector debe prevalecer en cualquier estado de situación.