Con una cena a la que asistieron personalidades del país, Acción Empresarial por la Educación Educa, arribó a su trigésimo aniversario de fundación, momento en el que postularon por un plan maestro a favor del sistema educativo dominicano bajo los principios rectores que sustentaron la razón de ser de su creación.
El presidente de Educa, Samuel Conde, manifestó que: “por eso exhortamos a considerar a Educa como un socio estratégico y confiable, capaz de diseñar y conducir ese plan maestro para el sistema educativo dominicano, designio que deberá ser realizado bajo los principios rectores que esbozaron los padres fundadores de nuestra institución, es decir, una alianza firme, sólida y equitativa, entre sector público y privado de la República Dominicana”.
En calidad de orador invitado, la actividad integró la participación del conferencista internacional, Rodrigo Arboleda, especialista en los campos educativos, de tecnología, y de desarrollo de negocios internacionales.
El programa de la actividad incluyó reconocimientos a los pasados presidentes de Educa, tanto de carácter póstumo como presencial, entre los cuales figuran Gustavo Tavares Espaillat; Luis Heredia Bonetti, Mario Cabrera Morín y George Arzeno Brugal.
También Luis Sánchez Noble, Celso Marranzini; Juan Tomás Tavares Kelner, Georges Santoni Recio; Elena Viyella de Paliza, José Mármol y monseñor Agripino Núñez Collado, en su calidad de presidente emérito.
De igual manera, integró el lanzamiento del Observatorio de la Inversión Privada en Educación, y la puesta en circulación de un libro memoria que recoge la historia de la trayectoria de la entidad durante los 30 años que viene trabajando a favor del sistema educativo dominicano.
A la cena aniversario asistieron distinguidas personalidades del ámbito social, educativo y académico, así como prominentes figuras de los sectores público, privado, económico y empresarial de la vida nacional.
Sobre Educa
Es una organización representante del sector privado nacional en materia educativa, que se ha esforzado desde sus cimientos en que todo niño, niña y adolescente cumpla con el derecho humano fundamental de recibir una educación de calidad, y de que los recursos presupuestados sean invertidos óptimamente a fin de lograr mejores calidad en la enseñanza.

