Los restaurantes, bares, cafeterías y otros negocios ubicados en las calles El Conde,
Arzobispo Meriño y otras de la Ciudad Colonial abrieron sus puertas al público, pero lucen vacíos a la espera de
los turistas y clientes habituales. Con la reapertura de los aeropuertos y de las operaciones hoteleras, los
propietarios de estos negocios esperan que la zona recobre el dinamismo económico que la caracteriza.