En Psiquiatría existe una condición denominada Ilusoria apreciación del Tiempo en la cual se perciben los acontecimientos como breves o como interminables.

Es el caso de los encuentros amorosos y cuando estamos ante noticias agradables, en estos momentos, nos parece que “ el tiempo paso muy rápido”.

Por el contrario las experiencias desagradables como los accidentes o la pérdida de un ser querido, nos resultan extremadamente largos en el tiempo.

Nuestro país atravesó por una desafiante pandemia de covid 19 que va comportándose como endémica ( el quebranto no desaparece totalmente).

A esto se agrega el impacto de la guerra ruso-ucraniana en la economía nacional.

Con todo, estamos en Navidad y frente a una campaña electoral precoz, en donde predominan los insultos y la falta de un verdadero debate de las ideas y las propuestas.

Los procesos judiciales que han estremecido al país con la detención por vez primera, de altos funcionarios del presente y pasado gobierno.

Estas acciones han recuperado parte de la confianza pérdida, que la ciudadanía tenía en la institución justicia.
En el plano de la educación pública se han detectado serios escándalos y una dilapidación descarada del 4% del presupuesto nacional.

Los feminicidios siguen su agitado curso y un patrón que enluta a diario a las comunidades.

Toneladas de drogas se detectan a diario y de forma personal el Sr. Presidente Don Luis Abinader pasa revista con los organismos de seguridad, al comportamiento de los residuos de la violencia.

La falta de agua; el descuido de los caminos vecinales; la inconsistencia del fluido eléctrico; el costo creciente de la canasta básica de los alimentos y la falta de credibilidad en la partidocracia son señales que nos atormentaron en este medio año.

El show de la Cámara de Cuentas y el acumulado de complicidades en ese alto organismo, constituye un retroceso más en nuestra vida institucional.

El poder legislativo, con honrosas excepciones, está plagado de gente de dudosa reputación. No me refiero solo a los riferos, sino también a ciertos monaguillos, que se aprovechan de estos curules, para hacer todo tipo de negocios y mediaciones turbias.

Las elecciones de febrero y mayo del año próximo dependerán en mucho de cómo termine el actual gobierno su complicada gestión.

Es mejor, terminar muchas pequeñas obras y promover fuentes de empleos, sobre todo para los disgustados, que iniciar ahora megaproyectos.

Las enemistades que se crearon en la división del PLD, en donde nació la FP, va a generar una recomposición de alianzas nunca vistas ni sospechadas, con vistas a forzar una solución de segunda vuelta a nivel del torneo electoral de mayo en donde el Lic. Abinader se medirá junto a un Leonel Fernandez, que busca ser presidente por cuarta vez.