MIAMI. AP. Con lágrimas en los ojos pero sonriente, Gloria Estefan subió a un estrado al final de una mancha que ella misma encabezó y que atrajo el jueves a miles de manifestantes en el barrio de Miami conocido como la Pequeña Habana, a fin de mostrar apoyo a los disidentes en Cuba. Gracias, Miami, gritó Estefan a la multitud que llenó la calle. Somos gente unida por nuestro amor a la libertad. Estamos aquí con todas nuestras diferentes banderas. Eso es lo que nos permite hacer este gran país. Al grito de Libertad, libertad», los manifestantes se congregaron en apoyo a las Damas de Blanco, un grupo de madres y esposas de 75 disidentes detenidos durante una operación realizada por el gobierno de la isla en el 2003. La semana pasada, cuando las Damas de Blanco marchaban por La Habana para conmemorar el aniversario de las detenciones, grupos progubernamentales las rodearon, y agentes de seguridad sometieron a varias. Durante la marcha de ayer, muchos participantes llevaron a sus niños y abuelos. Estefan, nacida en Cuba y condecorada con el Grammy como cantante y letrista, mostró una foto de las Damas de Blanco y portaba dos gladiolas, las mismas flores que las disidentes cubanas llevan en sus protestas.