POR JOSE MIGUEL MONTERO
El Nacional
Cientos de familias tuvieron que abandonar esta madrugada presurosas sus hogares, tras la explosión que estremeció a la provincia Santo Domingo y el subsecuente incendio que se produjeron en una envasadora de gas licuado de petróleo (GLP) en la autopista de San Isidro, a las 12:30.
Fuente hospitalarias y de socorros han confirmado al menos 18 heridos, algunos de ellos graves.
Solamente en 1998 cuando el famoso rumor del tsunami pudo haber más gente huyendo en las calles.
Hombres, mujeres y niños, en toallas, pijamas y aun casi desnudos corrían por las calles de los residenciales que bordean todo el entorno de la autopista.
El incendio se produjo poco después de la medianoche en la envasadora León Gas, próximo al destacamento de la avanzada de la Policía, en el trayecto hacia la Base Aérea de San Isidro.
El siniestro se produjo como consecuencia de un escape en un tanquero que descargaba de entre 9 mil y 10 mil galones de gas.
A esa hora sólo estaban en el lugar el guardián, identificado sólo por el nombre de Jacobo, y el chofer del cabezote. Ambos resultaron heridos al igual que otros once que pasaban por el lugar y fueron alcanzados por las llamas y las ondas expansivas.
Unos fueron internados en la Unidad de Quemados del hospital Luis Eduardo Aybar (Morgan) y la Plaza de la Salud.
Sufrieron quemaduras de primer y segundo grados.