Articulistas

Futbol solo futbo

Futbol solo futbo

Jorge Rolando Bauger

“El rey”

Con frecuencia decimos que entre el fútbol y la música existe una simbiosis perfecta.
Eso es así y, múltiples ejemplos corroboran nuestro pensar.

Uno de los más reveladores es, la icónica y clásica canción de la cultura musical mexicana *El Rey * que compuso el mexicano José Alfredo Jiménez (1926-1973) conocido como el poeta de la desolación. Jiménez jugó al fútbol como portero y fue cachanchán de parrandas noctámbulas de la famosa Chávela Vargas.

Uno de los párrafos de la canción * El rey * que interpretó con éxito Vicente Fernández dice: * Después me dijo un arriero, no hay que llegar primero, pero hay que saber llegar…*.

Cuanta sabiduría refleja esta estrofa que bien podemos aplicar al fútbol como a la cotidianidad de nuestras vidas.
En el mundo del fútbol existe una urgencia extraordinaria para llegar, pero el arribo a la cúspide que no se sustenta con constancia, trabajo, dedicación, vida ordenada y profesionalismo, es muy fugaz, es efímero y se desvanece.
Y, una vez más recurrimos a los ejemplos para sustentar lo señalado.

Jaime Ivan El Nine Kaviedes La trayectoria de uno de los mejores futbolistas ecuatorianos, es muy reveladora.
En 1988 marcó 43 goles con el Emelec de su país y se convirtió en el máximo goleador mundial, lo que le catapultó a la fama.

Los goles de Kaviedes le convirtieron en el primer ecuatoriano que jugó en las cuatro grandes ligas europeas. Militó en el Perugia de Italia, en el Celta de Vigo de España, en el Porto de Portugal y el Cristal Palace de Inglaterra además de haber jugado en equipos de México, Qatar y Argentina.

Su agitada vida social extra futbolística le impidió consolidarse en Europa, pero
con todo y eso, jugó 55 partidos con la selección de su país.

Hoy en día se confiesa como un ex adicto y sigue considerándose un futbolista que vivió una vida intensa y desordenada.

Freddy Adu
Lo de este jugador categoría 1989 es único. Dado que la MLS necesitaba llevar gente a los estadios, la dirección de mercadeo construyó en torno a la figura del futbolista más joven que debutó profesional (a los 14 años) y con un padrino de la talla de Pelé, a una figura emblemática.

En el 2007 Adu fue vendido al Benfica de Portugal, luego lo prestaron al Mónaco y de ahí pasó a jugar en ligas de inferior calidad como la de Grecia, Turquía, Serbia, Finlandia y Suecia.

Por su real carencia de condiciones, Freddy Adu no pudo triunfar en el fútbol profesional y se convirtió en un juguete roto.

Al final, respetados lectores, en cualquier aspecto de la vida, lo importante no es lo que se promete sino lo que se cumple.