Vida después de la muerte
El tema de la vida y la muerte es inherente a la existencia misma, pero, pocas veces nos planteamos esta situación, poco o nada hablamos al respecto y, tenemos la sensación de que, mientras menos hablemos de ello, mucho mejor.
Pero, como la inagotable musa del bendito fútbol siempre nos indica el tema a desarrollar, en esta ocasión, escribiremos acerca de * La vida después de la muerte *
Es necesario recordar que hace exactamente nueve meses (el 12 de junio del 2021 para ser exactos), el futbolista danés Christian Ericksen, el talentoso futbolista danés (30) jugando para su selección, sufrió un paro cardiaco, se desvaneció sobre el terreno de juego y estuvo clínicamente muerto.
Como era juego oficial de la EURO 2000, el mundo vio el trágico suceso. La rápida asistencia de los médicos de ambos equipos, auxiliados de un DAE (Desfibrilador automático externo) tardaron 5 minutos en reanimarlo y hoy en día. Christian Ericksen ha vuelto a jugar.
¿Milagro?
¿Aporte de la ciencia al deporte?
Luego de ese episodio, al futbolista danés se le colocó un desfibrilador subcutáneo y recuperó su vida regular, pero, como las leyes italianas prohíbenque un deportista profesional juegue portando un desfibrilador, mismo si este es subcutáneo, su empleador, el Inter de Milán lo liberó del contrato.
Christian quería seguir jugando y durante varios meses entrenó con los juveniles del Ajax (Países Bajos) para luego firmar un contrato con el Bradford de la Premier League.
Lo de Christian Ericksen es atípico, aunque no es el único caso de un futbolista de alto nivel que, luego de una operación cardiaca, ha vuelto a la alta competencia y como dicen que la evolución tecnológica actúa en favor de los osados, Ericksen es un claro ejemplo de ello.
Ahora que en nuestro país inició una nueva edición de la Liga de Fútboln Profesional (LDF), consideramos que es el momento oportuno para EXIGIR que cada estadio donde se juegue la Liga, disponga de un DAE (Desfibrilador
Automático Externo).
El uso de este equipo que puede salvar vidas, es sencillo y su costo no es superior a los tres mil dólares. Para que en el fútbol nacional también pueda haber vida después de la muerte, deberíamos disponer de Desfibriladores Automáticos.
Externos en los estadios.
Concluimos con el pragmático pensamiento del uruguayo Mario Benedetti:
Después de todo, la muerte es solo un signo de que hubo vida…