El genuflexo, es la persona que se arrodilla como reverencia ante un poder superior. Desde tiempos atrás, nuestra sociedad por su mentalidad estomacal viene acostumbrándose a inclinarse frente al poder que le resolvería el pan de cada día; es decir, la búsqueda de la comida para el sustento de su familia.
La mentalidad de la mayoría de los dominicanos, ha sido fomentada vía el clientelismo, tanto por entidades del estado, pero también colectivas como las ONGs, movimientos y partidos políticos, están transformando la débil mentalidad del dominicano conservador; son personas genuflexas, que se arrodillan ante el poderoso que podría darle algo para la comida de su familia, aunque, nunca le de nada.
Cuando el dominicano con su mentalidad estomacal siente que la comida de sus hijos está en peligro porque alguien conspira; suele decir: ¡Fulano está conspirando contra la comida de mis hijos! -Saluda: ¡Fulano cómo está, !oh! aquí buscando el moro!- ¡Aquí buscando la habichuela para mí familia! Es por eso por lo que, sobre la base del padre de familia se ha constituido como especie de “Código del Padre de Familia” que, los protege al violar leyes, reglas de urbanidad y tránsito y otras reglas sociales.
Al ser los choferes del concho protectores estomacal de las familias, les permiten montar y desmontar pasajeros, exactamente debajo del letrero con la señal ¡No Pasajero! Frente al agente de AMET; lo mismo de los motoconchistas y deliberes, carretear entre dos vehículos y por encima de las aceras, sin que las autoridades los multen. Un policía de los Ninjas corría a velocidad por encima de la acera en la 27 de febrero, alguien le señaló al AMET de servicio lo que estaba pasando; la respuesta fue: – “Entre bomberos no se pisa manguera”. Al parecer, los agentes se cuidan de no violar el Código del Padre de Familia.
Para la época de campaña política, esta situación se incrementa aún más, ya que el partido gobernante, no quiere caer en desgracias con esos señores protegidos por el código, porque votarían en contra de sus candidatos; lo mismo sucede con los Invasores de propiedades que, se le prohíbe al Abogado del Estado, ordenar las fuerzas públicas para desalojar a esos padres de familias que salen de madrugada a buscar el moro para sus familias.
Estos señores junto a los choferes de las voladoras que, buscando el moro para su familia, conducen de manera temeraria, sin importarles los derechos de vía de los demás conductores, así como el derecho de los ciudadanos como peatones. Entonces, la pregunta es la siguiente: ¿Qué piensa hacer el actual Director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre -INTRANT- Milton Morrison con estas violaciones?.
Por: Luis Maria Ruiz Pou
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