Laureano encuentra poco a poco su ritmo eléctrico

OAKLAND — Ralentizado por el óxido acumulado tras pasar nueve meses entre la acción de las Grandes Ligas y una lesión en la mano que sufrió poco después de regresar de su suspensión, Ramón Laureano ha tenido problemas para encontrar su ritmo en el plato esta temporada. 

Un jugador no regresa con dos buenos juegos. Pero para Laureano, su desempeño en los últimos dos días es una señal prometedora para los Atléticos de que su excitante jardinero finalmente podría estar volviendo a estar en forma. 

En la derrota de Oakland por 11-4 ante los Vigilantes el sábado en el Coliseo, un día de dos hits para Laureano se destacó por su primer jonrón de 2022, cuando se abalanzó sobre un sinker en el primer lanzamiento dejado en la zona por Taylor Hearn, el abridor de los Vigilantes.  

El jonrón de Laureano conseguirá el bombo. Sin embargo, la clave para salir de la mala racha de 55-10 (.182) con la que entró en el día durante sus primeros 18 juegos puede haber sido descubierta en lo que de otro modo fue un elevado indescriptible al jardín derecho en su anterior turno al bate contra Hearn. 

Después de abrir la parte baja de la primera entrada con un ponche, Laureano fue al plato en la tercera e hizo un ligero ajuste en la posición de sus manos. Ese elevado a la derecha fue el resultado, pero se quemó del bate a 99 mph, según Statcast. Fue un batazo al campo opuesto que ha sido común para Laureano cuando ha tenido éxito en el pasado. 

Efectivamente, Laureano solo parecía quemar la pelota más y más fuerte a medida que avanzaba el juego. Su jonrón solitario en el quinto registró una velocidad de salida de 108.3 mph y recorrió un estimado de 397 pies. Volviendo al plato nuevamente en el séptimo, conectó un sencillo de 104.9 mph a la izquierda, lo que lo llevó a anotar otra carrera para los Atléticos más tarde en la entrada con un roletazo de Elvis Andrus. El jonrón y el sencillo fueron la segunda y quinta pelota más dura de todo el juego por parte de cualquiera de los equipos, respectivamente. 

El ajuste de Laureano fue notado después del partido por el entrenador de banca de los Atléticos, Brad Ausmus, quien reemplazó como dirigente el sábado mientras Mark Kotsay estaba fuera del club para asistir a la graduación de su hija en el sur de California. 

“Hubo una gran diferencia entre su primer turno al bate y los siguientes”, dijo Ausmus sobre Laureano. “Hizo un pequeño ajuste después del primer turno al bate, y fue muy notable de inmediato. No solo porque golpeó la pelota con fuerza, sino que se podía ver que liberó un poco su swing. Parecía más fácil y fluido”. 

Los Atléticos saben qué tipo de bujía puede ser Laureano cuando está bien. Destellos de eso también aparecieron en la derrota del viernes por la noche 8-5 ante los Vigilantes, cuando encendió una entrada de cinco carreras para Oakland al conectar su primera carrera con un sencillo y luego causar estragos en las bases al robar la tercera base y anotar en un tiro abierto que fue apresurado por el receptor Jonah Heim. 

“Disciplina en el plato, me siento muy bien”, dijo Laureano tras la derrota del viernes. “Creo que solo se trata de trabajar en mi posición en el plato. No he estado conduciendo la pelota como quería en absoluto, así que tengo que encontrar lo que es empezar a conducir la pelota. Simplemente trabajé detrás de escena para comenzar a conducir la pelota poder ayudar a este equipo, porque no estoy ayudando como quiero”. 

La defensa de Laureano sigue siendo tan buena como siempre, con su cambio al jardín derecho esta temporada que le permite más oportunidades de mostrar lo que se considera uno de los mejores brazos de lanzar en el béisbol. Entre la velocidad que cambió el juego que se mostró en las bases el viernes y una mayor conducción de la pelota el sábado, el jardinero podría estar bien encaminado para desempeñarse a los altos estándares que se impone a sí mismo. 

Un escenario en el que se calienta lo suficiente como para llevar la ofensiva por un período de tiempo es ciertamente algo que sus compañeros de equipo no han visto antes. 

“Es un jugador eléctrico. Todos lo sabemos”, dijo el zurdo Cole Irvin de los Atléticos. «Solo verlo es muy divertido, noche a noche».