La Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales, CDEEE, está adquiriendo por medio de licitaciones equipos, accesorios y repuestos, por más de RD$500 millones para el uso en la Central Termoeléctrica Punta Catalina, los cuales debieron ser suministrados por el Consorcio Odebrecht-Tecnimont-Estrella.
Es insólito que después que el país ha pagado más de US$3,500 millones por Punta Catalina tenga que seguir erogando más dinero por equipos que los contratistas están obligados a entregar por exigencia del contrato.
Parte de los equipos, que la CDEEE está adquiriendo ahora, son esenciales para el funcionamiento y mantenimiento de Punta Catalina y para el control de las emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero.
Con la carencia de los filtros, canastos y del sistema de aspiración MVS para limpieza de los hidratores de cal y ductos del Sistema de Control de Calidad del Aire, Punta Catalina no puede cumplir con las normas y estándares ambientales contemplados en la legislación nacional, en las normas del IFC, del Banco Mundial, Principios de Ecuador y del Acuerdo de Paris, suscrito por el Estado y ratificado por el Congreso Nacional.
El sistema de control de calidad del aire es imprescindible para preservar el medio ambiente y a las comunidades aledañas de los impactos contaminantes de la combustión del carbón de las plantas de la termoeléctrica.
A través de nueve licitaciones publicadas entre finales del año pasado y el presente mes de mayo, la CDEEE está adquiriendo, además de estos equipos relacionados con el control de las emisiones, tramerías, mobiliarios y herramientas para instalar los talleres eléctricos y mecánicos, y los laboratorios, así como cámara termográfica y analizadores de vibraciones, grúas, montacargas, plataformas y otros equipos.
El Consorcio estaba obligado al momento de entregar Punta Catalina de dejar dos plantas funcionando de forma óptima, completas con todos sus equipos, un almacén con todos los repuestos por al menos un año, cuarto de servicio técnico, una biblioteca con todos los manuales de las plantas y el personal debidamente entrenado.
Estas licitaciones son una contundente demostración de que la CDEEE y el Gobierno dominicano han recibido a Punta Catalina de forma incompleta, a medio talle, con carencias de equipos esenciales y vitales para su correcta operación y funcionamiento, para el cumplimiento con las normas ambientales.
POR. Enrique de León