ATLANTA– (Del Journal Constitution) – El lanzador del Salón de la Fama Phil Niekro, quien pasó 21 de sus 24 años en las mayores con los Bravos, murió el sábado. Esto es lo que se dice en todo el béisbol sobre el jugador de nudillos:

“Phil será recordado como una de las personas más geniales de nuestro deporte. Siempre representó su deporte extraordinariamente bien, y lo extrañaremos profundamente. En nombre de la Major League Baseball, extiendo mis condolencias a la familia de Phil, los amigos y los muchos fanáticos que se ganó a lo largo de su vida en nuestro pasatiempo nacional”.

– Comisionado de MLB, Rob Manfred

“Él fue el más grande. No hay un adjetivo o palabra para describir lo especial que era y lo que significaba no solo para la organización de los Bravos sino para todos los que estaban a su alrededor, te hacía sentir como si fueras el único miembro del Salón de la Fama en el edificio”.

-John Smoltz

«No escuchas a mucha gente, si es que alguna vez, decir algo malo sobre él. Nunca escuché a nadie decir que no les gustaba Knucksie. Eso dice mucho. Cuando eres un atleta o una celebridad hasta cierto punto, inevitablemente habrá personas a las que no les gustes por cualquier motivo, aunque no te conozcan. Pero nunca escuchaste eso de Knucksie. Todo el mundo lo amaba».
-Tom Glavine

«Uno de los tipos más agradables con los que he estado. Extraño estar sentado en la oficina de Bill Acree escuchando sus historias».
-Greg Maddux

“Nancy y yo estamos profundamente tristes por la noticia de hoy del fallecimiento de Phil Niekro. Knucksie era único en su clase. Amigo, compañero de equipo, padre y esposo. Nuestros corazones están con Nancy Niekro, los niños y nietos. Muy agradecido por nuestros recuerdos y el tiempo que pasamos juntos. Te extrañaremos, Knucksie».
-Dale Murphy

“Muy triste hoy. Phil Neikro me ayudó de una manera profunda a cambiar el curso de mi carrera y mi vida. Me conmovió perpetuamente su amabilidad, sabiduría y sentido del humor. ¡Qué hombre! Él será extrañado. ¡Gracias Phil!»
-R.A. Dickey

“Lo que realmente me gustó de él, fue cuando yo era entrenador de ligas menores y él estaba en las grandes ligas y uno de los mejores lanzadores de todo el béisbol, me trataba como si me hubiera conocido de toda la vida y yo solo tan importante como un entrenador de ligas menores como un entrenador de grandes ligas. Siempre te hacía sentir cómodo con él. Era una superestrella, pero nunca lo habrías sabido».
-Leo Mazzone