SINTOMAS: Fiebre repentina de más 38°, tos intensa, dolor de cabeza y de articulaciones intensos, falta de apetito, congestionamiento nasal y malestar general.
DIAGNOSTICO: Se realiza a través de un «examen clínico detallado», que incluye estudios de secreciones de nariz y laringe durante las primeras 24-72 horas y de sangre para identificar anticuerpos.
TRATAMIENTO: En los casos confirmados, las autoridades mexicanas suministran los antivirales oseltamivir y zanamivir, pero sólo bajo una estricta supervisión médica ya que son fórmulas «de uso delicado» y su aplicación errónea «no está exenta de efectos secundarios».
MEDIDAS PREVENTIVAS: Usar tapabocas. No saludar ni de beso ni de mano, no compartir alimentos, cubiertos ni vasos, ventilar las casas y oficinas, permitir la entrada de luz solar, mantener limpias las cubiertas de cocina y baño y los artículos de uso común, como teléfonos, juguetes, etc.